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El Museu de Menorca es un elemento clave para la futura declaración de Patrimonio de la Humanidad para el tesoro talayótico. Este centro, que no recibe las visitas que merece ni de lejos, sufre desde hace siete años problemas importantes por la falta de climatización, que perjudica a la colección museística. Es increíble la forma en que el Ministerio de Cultura ha despreciado la necesidad de esta institución cultural de la Isla. ¿Cómo se puede aspirar a la declaración de Patrimonio de la Humanidad si no somos capaces de garantizar la conservación de los materiales arqueológicos? El anterior Gobierno se despidió asegurando una partida de 4,5 millones para la climatización del Museu. Incluso en 2012, el Ministerio solicitó al Ayuntamiento la licencia de obras para realizar la mejora. Este es el último paso conocido para llevar a cabo las obras. En nuestra edición de hoy se pone de manifiesto que el dinero destinado a Menorca se ha desviado a Valencia para la reforma del Museo de Bellas Artes San Pío V, a la que se destinarán 13 millones de euros. Esta situación cuestiona la apuesta por la arqueología y enfría las ilusiones de quienes creen en su potencial, ante una Administración cuyos hechos y palabras se contradicen.