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Oíche Shamhna (la Noche de Samhain) o Halloween como se llama ahora, es uno de los cuatro festivales anuales de fuego porque celebra el principio del año nuevo en el calendario celta y el comienzo del invierno.

Los celtas creían que entre el año viejo y el año nuevo el tiempo se volvía «difuso», que las barreras entre este mundo y el más allá dejaban de existir. Durante tres días se abrían las puertas entre los dos mundos y los espíritus de los muertos podían venir a caminar entre los vivos.

Según la mitología irlandesa, durante la noche de Samhain la princesa-guerrera Scáthach (sombra) bajaba su mágico escudo, así dejando sin protección la frontera entre este mundo y el más allá.Con la llegada del cristianismo, el clero intentó abolir la celebración de Samhain. Al ver que esto no era posible, se decidió trasladar la festividad, originariamente primaveral, de Todos los Santos (All Hallows, en inglés) al día 1 de noviembre y el Día de las Ánimas al día 2 de noviembre. (Los ritos cristianos orientales siguen conmemorando el día de Todos los Santos en mayo).Este esbozo cultural demuestra que los festivales nos sirven para sentir de adentro hacia afuera y que es en el foro interno en donde se aúnan los lazos que nos conectan los unos a los otros (vivos y difuntos), sintiéndonos ya como invisibles en la noche mágica que somos.Hibernar que es lo propio del Noviembre (Samhain en Irlanda), nos adentra hasta percibir las raíces que son comunes a todos y a todo llevándonos al sueño invernal que hace patente y palpitante cuanto anhelamos en otras estaciones del año.

La naturaleza en el hemisferio Norte luce ya sus colores más vivos y lustrosos si bien cercanas las hojas a su caer, la alfombra de estas por tierra rivaliza igual al más luciente tapiz de trama persa… «Entra en la trama…Tú que has tomado la determinación de ser. Sea cual sea la imagen a la que interiormente estás unido (siquiera sea en un instante fugaz), siéntete como está en juego todo el tapiz…El tapiz glorioso». (R.M. Rilke) Ojalá que la recuperación de la fiesta de Samhain sea más tradicional y menos mercantil.