El papa Francisco en una imagen de archivo en Fátima.

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El papa Francisco pidió este jueves al mundo «no permanecer indiferente» ante «tragedias» como el último naufragio ocurrido en el Mediterráno Central, en el que 41 personas murieron al volcarse la frágil embarcación en la que viajaban desde la localidad tunecina de Sfax.

«He recibido con dolor la noticia de un nuevo naufragio de migrantes en el mar Mediterráneo. No permanezcamos indiferentes ante estas tragedias y recemos por las víctimas y sus familiares», escribió el pontífice en su cuenta de Twitter.

Según los testimonios de los cuatro supervivientes (un menor de 13 años no acompañado, una mujer y dos hombres) rescatados por un buque mercante y puestos a salvo este miércoles en Lampedusa (sur) por la Guardia Costera italiana, 41 personas están desaparecidas, entre ellos 3 niños, tras el naufragio ocurrido entre el 3 y el 4 de agosto.

Los cuatro rescatados, que lograron sobrevivir al agarrarse a una barca metálica seguramente abandonada por otros migrantes, llegaron en estado de shock y han sido escuchados por la fiscalía de Agrigento, que ha abierto una investigación por el incidente.
A raíz del naufragio, la ONU pidió «mecanismos coordinados de búsqueda y rescate y vías seguras y legales para la migración y el asilo», tras recordar que «hace apenas unos días una madre y un niño ya habían perdido la vida» frente a Lampedusa.

El pasado sábado se informó de otros dos naufragios junto a la isla italiana en los que murieron 34 personas, aunque solo se pudieron rescatar tres cadáveres en medio de un fuerte temporal y también fueron los 57 rescatados los que explicaron que sus compañeros de viaje se habían caído al mar.

«En los últimos seis meses, 903 inmigrantes han muerto, incluidos 289 niños, tratando de llegar a Italia», escribió en sus redes sociales el escritor Roberto Saviano, que acusó al Gobierno italiano de «detener a las ONG e impedir un patrullaje que la Guardia Costera y (el servicio de vigilancia europeo) Frontex no pueden realizar».

Según la Organización Internacional de las Migraciones, «más de 1.800 personas ya están muertas y desaparecidas a lo largo de la ruta, que sigue estando entre las más transitadas y peligrosas a nivel mundial, con más del 75 % de las víctimas en el Mediterráneo en los últimos diez años».

Según los últimos datos del Ministerio del Interior italiano, en lo que va de año han desembarcado casi 94.000 migrantes en las costas italianas, más del doble de los cerca de 45.000 del mismo periodo del año anterior.