Vista del 'skyline' de Londres. | Reuters - HOLLIE ADAMS

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El Banco de Inglaterra parece dispuesto a mantener los tipos de interés en su nivel más alto en 15 años más tarde el jueves, pero los inversores están más centrados en si los dirigentes monetarios tratarán de frenar las crecientes apuestas del mercado sobre una serie de recortes de tipos el próximo año. El Banco de Inglaterra ha mantenido los tipos en el 5,25% desde agosto, tras 14 subidas consecutivas a partir de diciembre de 2021.

El gobernador, Andrew Bailey, ha subrayado que los costes de endeudamiento deben mantenerse altos «durante un periodo prolongado» para acabar con la amenaza que suponen las presiones inflacionistas. Mientras otros bancos centrales sugieren que se avecinan recortes, incluida la señal más clara de la Reserva Federal sobre un cambio de postura el miércoles, la línea dura del Banco de Inglaterra contra este tipo de debate en Reino Unido está siendo cuestionada en los mercados.

El jueves, los inversores pronostican casi cinco reducciones de un cuarto de punto en el tipo de interés bancario durante 2024, con la posibilidad de que la primera rebaja se produzca ya en marzo. Estas posiciones pueden alarmar al Banco de Inglaterra, que sigue preocupado por la inflación. Aunque ha descendido desde el máximo de 41 años del 11,1% que alcanzó en octubre de 2022, sigue siendo más del doble del objetivo del BoE, del 4,6%, y más alta que en otros países ricos. Se prevé que descienda sólo gradualmente en los próximos dos años.

Sin embargo, los datos de esta semana han sido más débiles de lo esperado, lo que aumenta la posibilidad de que la inflación caiga más rápidamente y de que el Banco de Inglaterra tenga que cambiar de rumbo antes de lo que ha sugerido. La economía británica se contrajo un 0,3% en octubre, la primera caída desde julio, lo que sugiere que el país —al igual que algunos miembros de la zona euro— corre el riesgo de entrar en recesión.

El crecimiento de los salarios también se ralentizó más de lo previsto, aunque el 7,3% registrado en los tres meses anteriores a octubre sigue estando cerca del récord del 7,9% alcanzado en verano y sigue siendo la principal fuente de inquietud inflacionista del Banco de Inglaterra. El banco central también debe tener en cuenta la actualización del presupuesto del 22 de noviembre del ministro de Finanzas, Jeremy Hunt, que sentó las bases para recortes fiscales en el período previo a las elecciones nacionales previstas para 2024.