Consejo. Marta Fernández Curras, Cristóbal Montoro y Antonio Beteta, antes de iniciarse la reunión - Reuters

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Cataluña, que ya había anunciado por la mañana que no estaría en Madrid, y Andalucía, que abandonó la reunión del Consejo de Política Fiscal y Financiera apenas una hora después de su comienzo, dejaron plantado al ministro Cristóbal Montoro, lo que él tildó de "poses políticas".

Las dos comunidades, que ya en la anterior reunión del CPFF, hace 15 días, plantaron cara al ministro, al votar en contra de la senda de déficit que Hacienda quiere hacer cumplir "sí o sí" a todas las comunidades en los tres próximos años, han vuelto a criticar que el Gobierno les quiera imponer unos objetivos de déficit y deuda que consideran discriminatorios y rechazables en el fondo y en la forma.

Pero Montoro no se dejó impresionar. En la rueda de prensa posterior a la reunión, el ministro de Hacienda y Administraciones Públicas restó importancia a lo ocurrido, y dejó bien claro que el Gobierno central ha apoyado y apoya a las dos comunidades en sus necesidades de liquidez.

"Es equívoco lanzar el mensaje de responsabilizar siempre a alguien, en este caso al Gobierno central, de los males propios, en vez de asumir las consecuencias de la propia gestión", razonó Montoro, que al mediodía, reconocía al concluir la rueda de prensa, conversó por teléfono con el consejero catalán de Economía, Andreu Mas-Colell.

Montoro entiende que Cataluña y Andalucía "están fallando a lo esencial del momento crítico que vive España", e insistió una y otra vez en que es momento "de comprometerse con la corrección del déficit", porque así lo exigen nuestros socios europeos y porque esa es la única vía para recuperar la credibilidad perdida.

¿Y qué hacer ahora con Cataluña y Andalucía?, le preguntaron al ministro. "Nada especial, aparte de exigirles, como al resto de comunidades, el cumplimiento de la Ley de Estabilidad Presupuestaria", dijo, porque "ese cumplimiento está por encima de cualquier ausencia".

"Exigimos a las comunidades porque nos exigimos a nosotros mismos", insistió Montoro, para quien nunca como ahora se han conocido tan bien sus "tripas", las de todas. "Es una ventaja para todos, para controlar y exigir", dijo.

Montoro informó de los acuerdos adoptados ayer en el Consejo de Política Fiscal y Financiera, sobre déficit y deuda, que no son otra cosa, en su opinión, que el cumplimiento de lo exigido por ley en la norma de estabilidad presupuestaria en vigor desde mayo.

Ley que obliga a todas las administraciones, central, autonómica y local, a la hora de combatir el déficit, en la consecución del equilibrio presupuestario y a perseguir la sostenibilidad de la deuda pública. Y, por vez primera en la historia del Estado autonómico, ha destacado Montoro, a presupuestar con techo de gasto.

"Necesitamos acabar con el incumplimiento de las normas europeas, porque es lo que conviene a los españoles, independientemente de donde vivan", ha afirmado Montoro.

En este Consejo, todas las comunidades autónomas gobernadas por el PP cerraron filas en torno al Gobierno, como anteayer les pidió el presidente Rajoy a los barones del partido, con los que se reunió en un almuerzo en la sede madrileña de Génova, y votaron a favor de los objetivos de déficit y deuda fijados por Hacienda para los tres próximos años.

Unanimidad en el voto que contrasta con la abstención de Extremadura y Castilla-León en la anterior reunión del Consejo, hace apenas 15 días, cuando Hacienda mantuvo para todas las comunidades el 1,5 % de déficit para 2012.