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Los buenos resultados de la subasta de letras de España de ayer dejaron la prima de riesgo en su nivel más bajo en tres meses y colocaron por encima de los 7.500 puntos al principal índice de la bolsa española, el Ibex 35, que se vio animado también por el alza de los mercados internacionales.

La prima de riesgo, que mide la confianza de los inversores en la capacidad de pago de España, bajó ayer por séptima jornada consecutiva hasta los 465,4 puntos básicos, su mínimo desde el 22 de mayo gracias a la subasta de deuda, según los analistas consultados.

Aunque la negociación fue escasa y el diferencial con Alemania no logró situarse por debajo de los 460 puntos básicos, como el lunes, la distancia es cada vez mayor respecto al máximo del 24 julio, cuando se alcanzó el récord de 638,4 puntos básicos.

En una jornada sin otra referencia de importancia salvo la subasta de letras, la bolsa española recuperó el nivel de los 7.500 puntos tras subir el 1 por ciento, en línea con los mercados europeos (Italia avanzó el 2,4 por ciento; Francia, el 0,94 por ciento; Alemania, el 0,79 por ciento, y Reino Unido, el 0,57 por ciento).

"Después de la subasta, el mercado ha tomado un nuevo tono aunque el volumen de negociación en deuda sigue siendo discreto", señala el director de la mesa de renta fija de Banco Madrid Marco Hernando.

El Tesoro Público logró captar ayer más deuda de la que se había propuesto, 4.514,6 millones de euros, en letras a 12 y 18 meses, al precio más barato desde mayo.

En concreto, colocó 3.532,9 millones en letras a 12 meses al 3,20 por ciento frente al 3,99 por ciento de la subasta anterior, celebrada el 17 de julio, y otros 981,6 millones en títulos a 18 meses al 3,45 por ciento, también más baratos que el 4,35 por ciento de la anterior puja.

Para Nuria Álvarez, de Renta 4, la subasta fue "bastante positiva", ya que "se ha colocado el máximo establecido, la demanda ha sido bastante sólida y los recortes de los interés, sustanciales".

Los analistas consultados por Efe explican que el mercado de deuda y el de renta variable han percibido un cambio radical en los mensajes sobre el futuro de la zona del euro respecto al mes de julio, ya que ahora hay una seguridad de que el Banco Central Europeo (BCE) actuará.