El exministro José Luis Ábalos, tras ofrecer su rueda de prensa en el Congreso. | Efe - FERNANDO VILLAR

TW
14

El PSOE ha decidido suspender cautelarmente al exministro de Transportes y exsecretario de Organización, José Luis Ábalos, como miembro del partido por no entregar el acta de diputado y pasar al Grupo Mixto, según una resolución firmada por el actual número 3, Santos Cerdán, a la que ha tenido acceso Europa Press.

El PSOE ha tomado esta decisión, después de que la Comisión Ejecutiva Federal diese un ultimátum de 24 horas a Ábalos para que renunciase al acta de parlamentario por «responsabilidad política» en el 'caso Koldo', que investiga presuntas mordidas en contratos de compra de mascarillas durante la pandemia de coronavirus.

En una esperada comparecencia ante los medios para comunicar su decisión, Ábalos ha defendido que renunciar a su acta, como le pedía su partido, sería asumir su culpabilidad. A continuación el portavoz socialista en el Congreso, Patxi López ha adelantado que el partido abriría un expediente de expulsión y replicó a Ábalos señalando que dar un paso a un lado «sería asumir su responsabilidad», que es lo que la dirección del PSOE venía diciéndole «desde hace tiempo», según ha indicado.

«Supongo que la Ejecutiva del partido empezará a tramitar un expediente de baja cautelar como militante socialista, que es lo que habíamos dicho desde el principio», ha señalado López en declaraciones a los medios en la Cámara Baja, justo después de que Ábalos comunicase su decisión de retener el escaño. Minutos después de las palabras de Ábalos y la respuesta de López, el partido ha confirmado la apertura de un expediente disciplinario y la suspensión cautelar del exministro.

Ha sido en una resolución difundida a los medios por la Comisión Ejecutiva Federal del PSOE en la que el partido indica que ahora estudiará en profundidad el caso, con la posibilidad de llegar más lejos con las sanciones previstas si finalmente se prueban algunas de las faltas imputadas a Ábalos, con medidas como la suspensión de afiliación, la inhabilitación para cargos públicos y orgánicos por un periodo de entre 2 y 18 meses o de 18 meses a 36 meses, e incluso la expulsión del partido.

Todo ello dependerá de si el partido estima que Ábalos ha cometido una falta grave o muy grave tras incumplir con la exigencia de la Ejecutiva Federal para que entregara su acta de diputado.

En concreto, el PSOE considera que Ábalos podría haber cometido una falta grave por la «obstrucción a la labor y decisiones de los órganos del partido» y tres muy graves, entre ellas «el abandono del cargo público para el que hubiera sido designado o elegido sin la previa autorización del órgano competente» de la formación.

Asimismo, el PSOE estima que el exsecretario de Organización socialista podría haber incurrido en una falta muy grave por actuar «en contra de acuerdos adoptados por los órganos de dirección» del partido y por «menoscabar la imagen de los cargos públicos o de las instituciones socialistas».

A partir de ahora, Ábalos dispone de un plazo de cinco días para hacer llegar al instructor de su expediente en Ferraz las pruebas que estime oportunas para defenderse de estas acusaciones de su propio partido.

Por el momento, la única decisión en firme es su suspensión cautelar de militancia lo que implica, según recuerda el PSOE, que Ábalos está libre de todos los derechos y deberes como militante socialista, excepto la obligación de abonar puntualmente las cuotas y de respetar las decisiones políticas de los órganos de dirección.