La candidata del PP, Marga Prohens, en el pleno de constitucion del Parlament, Jorge Campos. | Jaume Morey

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Marga Prohens será la próxima presidenta del Govern con un gobierno en el que solo se sentarán consellers del PP. PP y Vox tienen previsto anunciar de forma inminente el acuerdo que desbloquee la investidura de Marga Prohens y que le permitirá ser la nueva presidenta. Los dos equipos negociadores tienen prácticamente cerrado el texto definitivo que garantiza la elección de Prohens. Según confirman desde los dos partidos, todavía quedan flecos pendientes en las materias donde han más discrepancias: la enseñanza del castellano en la educación y políticas de igualdad. El preacuerdo que firmaron las dos formaciones a principio de esta semana incluye tanto las propuestas que recoge el PP en su programa electoral como la retórica de Vox en el suyo.

Vox insiste en que deben definirse mejor estas líneas y en este aspecto en el que se está trabajando. También se busca una mejor definición de las materias relativas a las políticas de igualdad, que se consideran difusas, pese a la inclusión de la expresión «violencia intrafamiliar», una de las exigencias de Vox.

Comisión de seguimiento

El tercer aspecto que queda por pulir es qué garantías tendrá Vox de que el PP cumple los compromisos adquiridos en este documento. Los negociadores señalan que se está buscando «una fórmula» que permita al partido de Santiago Abascal vigilar el cumplimiento de los acuerdos y presionar para que se apliquen en caso de que el PP no haga caso de lo pactado, como sucedió en Andalucía.

El secretario general de Vox,  Ignacio Garriga, también se expresó esta semana en estos términos, cuando pidió buscar «fórmulas novedosas» para que el PP no actúe como en Andalucía, donde entienden que no cumplió sus pactos con Vox. Esa fórmula es el asunto fundamental sobre el que negocian PP y Vox y mientras los de Jorge Campos aseguran que podría ser la entrada de Vox en puestos de segundo nivel, desde el PP descartan esta opción y señalan que la idea es poner en marcha una comisión que vigile el cumplimiento de los acuerdos.

En las negociaciones también se han puesto sobre la mesa algunos de los puntos en los que coinciden las dos formaciones, especialmente en materia económica, pero también se apunta que habrá acuerdo en una reducción sensible del número de cargos políticos de la Administración autonómica. Habrá menos conselleries –ahora son once, además de la presidenta del Govern– y los dos partidos están de acuerdo de forma clara en que debe desaparecer la Oficina Anticorrupción, algo que las dos formaciones han reclamado desde la oposición.

Las leyes de la izquierda

Representantes de los dos equipos negociadores señalan, también, que no hay una previsión de derogación masiva de las leyes aprobadas por la izquierda durante estos ocho años, pero si habrá modificaciones en algunas de ellas. Las que se mencionan seguras son la Ley de Educación y la de Turismo, pero también habrá cambios en leyes como la LGTBI.

Este cierre inminente de las negociaciones llega poco después de que el propio presidente nacional de Vox, Santiago Abascal, abriera la puerta a un Govern de Marga Prohens sin Vox. En unas declaraciones a Canal Sur Radio, precisó que su modelo «óptimo» es que Vox esté en los gobiernos, como ha pasado en Castilla y León y la Comunitat Valenciana, pero también señaló que los resultados de Vox y del PP son diferentes en cada comunidad autónoma. En línea con al acuerdo que está a punto de cerrarse, Abascal también señaló que a su partido le preocupa más el programa que los cargos. «Más que de sillones queremos hablar de ideas», afirmó.

También el presidente de Vox se refirió a la necesidad de buscar un mecanismo que permita garantizar el cumplimiento de los acuerdos. «No nos sirven los acuerdos de investidura porque luego el PP no los cumple. El PP no ha sido leal a la palabra dada en otras ocasiones», señaló el líder de Vox en estas declaraciones. PP y Vox esperan cerrar en breve las negociaciones definitivas y no se descarta que el próximo lunes se firme el acuerdo definitivo entre los líderes de las dos formaciones políticas de Baleares.