El cielo se ha abierto para el Menorca Bàsquet a partir de la progresión sostenida que ha mostrado en el reciente play-off de cuartos de final por el ascenso a la ACB ante el Breogán de Lugo.
El equipo de José María Berrocal ha fulminado al cuadro gallego con tres triunfos consecutivos, los dos últimos en el terreno hostil lucense, que le permiten recuperar el máximo respeto de sus rivales y, con él, la condición de serio aspirante al que sería su tercer desembarco en la ACB en ocho años.
El golpe de autoridad dado en el Pazo Provincial de Deportes de Lugo ha sido mano de santo para la autoestima del grupo y la confianza del entorno. No es sencillo ganar en una cancha de aquellas dimensiones con una afición entregada a la causa, y el Menorca lo consiguió.
Con esas credenciales el equipo regresó ayer a la Isla y prepara desde hoy la próxima cita semifinal frente al Grupo Iruña Navarra, su bestia negra de la Liga regular puesto que no pudo ganarle ninguno de los dos encuentros (72-82 en Maó y 89-79 en Pamplona).
Este pasado, sin embargo, no será óbice para que el plantel menorquinista sea capaz de salir airoso de alguno de los dos encuentros que se juegan este viernes (20.30) y domingo (19.00) en el Pabellón Anaitasuna de Pamplona reiterando la razón a Berrocal para quien el factor pista no es definitivo en las series de ascenso.
La profundidad de banquillo de la que disfruta el Menorca y el salto cualitativo que reclamaba el entrenador en los jugadores de rotación han sido las claves sobre las que ha edificado el equipo su éxito en los cuartos de final. La intensidad defensiva, fundamental, se ha mantenido gracias a esas rotaciones y jugadores como Bas, Jiménez o Matalí, entre otros, han dado el plus que reclamaba su técnico en esta eliminatoria.
En los cuartos de final el Menorca sólo ha encajado una media de 68 puntos por encuentro y ha anotado 76,8, el mejor ataque entre los ocho equipos que juegan el play-off. El Navarra ha promediado 75,5 puntos a favor por 73,2 en contra frente al UB La Palma.
En la Liga regular, sin embargo, el ataque de los pamplonicas ha sido superior al del Menorca (79,1 por 76,5), pero en defensa, la de los menorquinistas supera a la de su rival de semifinales (71,8 puntos encajados por encuentro frente a los 76,3 que recibió el Navarra).
El Grupo Iruña Navarra de Angel Jareño, que fuera ojeador del Menorca Bàsquet en la temporada 2008-09, vive instalado en un sueño permanente considerando que su meta inicial era la permanencia en la que es su segunda temporada en la Adecco Oro.
Con el gigante Starosta como referencia (14 puntos y 8,5 rebotes), el equipo sólo ha perdido seis partidos en toda la segunda vuelta de la Liga. Los bases Uriz y Sanz, que se complementan a la perfección, los interiores Langford y Jorge García, y los exteriores, Narros, Rakocevic y Víctor Pérez son el grupo de elegidos en una plantilla corta pero que sabe a lo que juega: precisa circulación de balón para buscar la mejor opción de tiro y balones hacia Starosta, imparable en el poste bajo.
Posible chárter a Pamplona y entradas en Maó
El Menorca Bàsquet gestionaba ayer que la compañía Air Europa, uno de los patrocinadores del club, flete un chárter para equipo y aficionados que viajaría a Pamplona el jueves y regresaría el domingo tras el partido. Además el club mahonés ya ha puesto a la venta las entradas para los partidos de la semifinal (uno o dos) que se jugarán en Maó.
Los socios podrán adquirir una entrada que valdrá para dos partidos (el club les regalará el otro si se disputa). El precio para los socios va desde los 9 euros, en la zona azul, hasta 19 en la roja. La entrada para los no abonados irá desde los 15 euros, la más barata, a los 35 la más cara, por partido.
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