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No andan muy contentos en Anaitasuna con el rendimiento del ala-pívot Kevin Langford (Fort Worth, Texas, 27 años, 2'04m). Fichado a principios de temporada para ser fundamentalmente uno de los referentes ofensivos del equipo, en la fase regular ha tenido unas prestaciones correctas (media de 11'1 puntos por partido, 4'4 rebotes y 1'5 asistencias), pero siempre por detrás del indiscutible Ondrej Starosta y del imprescindible Mikel Uriz, y sin llegar a la regularidad prevista.

Una regularidad que se esperaba que fuera en aumento en un momento decisivo como en un play off. Superada La Palma en cuartos, la visita a Pamplona del Menorca Bàsquet tampoco ha supuesto un paso adelante para el americano. Algo mejor en el segundo partido, donde anotó 10 puntos, en el primer duelo ni cubrió el expediente con 6 y un 5 de valoración en un momento clave del calendario y en su tercera temporada como profesional.

Kevin empezó fuerte su andadura en la LEB Oro, convirtiéndose en el mes de noviembre en el más valorado del equipo. Pero su rendimiento no ha ido a más, quedándose muy lejos de un referente directo como su hermano, dos años mayor, Keith Langford, jugador que fue MVP de la Eurochallenge con el Virtus Bolonia (2009) y que ahora juega en el Maccabi tras hacerlo en el Khimki. Kevin y Keith a punto estuvieron de estar separados por tan solo 90 kilómetros: Kevin fichó por el Iruña y Keith tuvo una oferta del Caja Laboral de Vitoria que, finalmente, rechazó.

Licenciado en Sociología se formó en las universidades de California y Texas Christian, donde destacó en base a sus 17'6 puntos y 11'9 rebotes de media por partido. De ahí pasó a Europa para recalar en el Padeborn de Alemania en la campaña 2009/10 y en el Debrecen de Hungría en la 2010/11. Luego pasó a Pamplona, con un roster en el que se destaca que es "versátil, tiene capacidad anotadora y de asistencias y, a pesar de no ser su mayor virtud, se esfuerza en tareas defensivas".

Todas esas virtudes parece que están dormidas. Los aficionados navarros, de los que se ganó su confianza al principio de llegar a Pamplona, están algo decepcionados porque en estos partidos clave no ven a Langford dar un paso adelante. Óbviamente, esta tarde en el Pavelló de Bintaufa nadie espera que despierte.