Miguel Juan UrbanoMaó04/10/12 0:00
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Víctor Fernández, magistrado del Juzgado número 1 de Lo Mercantil de Palma de Mallorca, dictó la semana pasada el esperado auto por el que aprueba la entrada del Menorca Bàsquet SAD en fase de liquidación. Arranca así el paso definitivo para la disolución del que fuera primer club balear de baloncesto que en la práctica, lleva casi tres meses sin realizar actividades de ningún tipo.

La aprobación del auto supone, desde entonces, el cese del Consejo de Administración de la Sociedad Anónima Deportiva presidido por Benito Reynés, y su sustitución por los administradores concursales, Bartolomé Bover y Alberto Baz, nombrados por el juez en julio de 2011, que serán quienes procedan a liquidar a la SAD. Según el procedimiento de esta fase, los letrados disponen de un plazo de quince días para presentar al juez un plan de liquidación que contemple las cuestiones pendientes de la entidad en cuanto a cobros y pagos.

Está previsto que la próxima semana Bover y Baz se desplacen a Menorca para hacer la entrega oficial de las llaves del Pavelló Menorca al conseller d'Esports del Consell de Menorca, Juanjo Pons, poniendo fin así, a la ocupación de la instalación deportiva que ha tenido el Menorca Bàsquet desde que fue construida en el verano de 2006.

Esa es una de las cuestiones principales que deben llevar a cabo los administradores una vez hayan acordado las condiciones en las que devolverán el Pavelló al consorcio propietario de la instalación. Como ya informó este diario, las discrepancias estriban en la cláusula de reversión de los bienes adquiridos por la SAD para el recinto pero que ya están amortizados. Según el contrato inicial esos bienes quedan en propiedad del consorcio cuando reciban las llaves del Pavelló, aunque los administradores negocian este y otros capítulos con el Consell de Menorca.

Bartolomé Bover se desplazó ayer a Menorca para mantener una primera reunión con el conseller d'Esports, Juanjo Pons, a la que también asistieron abogados de la institución menorquina. Con la máxima celeridad posible, el nuevo administrador de la SAD debe alcanzar acuerdos con las tres instituciones en relación a las cantidades que están adeudan a la SAD, en total, 1.251.000 euros como informó este diario el pasado día 19 de septiembre.

En una primera valoración las posturas están bastante alejadas. Tanto Bover como Pons declinaron ayer entrar en detalles de la negociación abierta aunque expresaron su voluntad para que la situación se desbloquee cuanto antes y la liquidación pueda llevarse a efecto sin nuevas dilaciones.

Ninguna de las tres instituciones reconoce las cantidades comprometidas en la pasada temporada porque no fueron documentadas. Y en cuanto al resto, ofrecen dudas en torno al pago de las subvenciones por el último ascenso a la ACB.

El Consell adeudaría 77.000 euros sin contabilizar el último ejercicio no firmado, 820.000 euros el Govern Balear y 109.000 euros el Ayuntamiento de Maó.

Los administradores concursales , además, deben vender los tres solares que posee la SAD en Son Parc, recibidos en su día como parte del pago del patrocinio que tuvo el Grupo Prasa entre los 2006 y 2010.