Ibon Miralles, aquí en una imagen de archivo, completó una última y correcta actuación con 15 puntos y 5 rebotes

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Castellbisbal 88
Sant Lluís 64

Nueva derrota del CCE Sant Lluís, que echó por la borda sus opciones en el tercer cuarto. Otro resultado doloroso que supone finalizar la temporada con una única victoria en su haber -a domicilio, frente al Salt- y ceder en esta ocasión ante un CB Castellbisbal que necesitaba la victoria para asegurar de manera matemática, sin depender de lo que pasara este domingo, su posición de permanencia en la categoría.

Ni mucho menos fue el peor partido del CCE Sant Lluís, que peleó de tú a tú durante toda la primera parte, desgantándose generosamente en el esfuerzo físico. Sin embargo, tras el descanso, el equipo barcelonés dio un salto de calidad importante, dominando el rebote defensivo y mostrándose mucho más acertado desde la larga distancia. Argumentos de peso para atar el triunfo.

El primer cuarto fue muy igualado, con un Menorca muy serio en materia defensiva y haciendo de su pintura un coto casi vedado al rival. El Castellbisbal, desacertado en el tiro, hizo crecer el juego insular. Alberto Artiles, siempre inteligente, hizo jugar al equipo y planteó dura batalla. El parcial no le fue favorable por pequeños errores y falta de fortuna en determinadas acciones.

El segundo acto fue mucho más trabado, con las defensas superiores a los ataques. Los dos equipos pasaron por momentos de incertidumbre ofensiva, donde cometieron múltiples errores groseros y de todo tipo, pero las distancias cortas en el marcador mantuvieron la tensión alta. Nuevamente el Sant Lluis estuvo fuerte en el rebote, especialmente en el defensivo, y una vez más se echó en falta un poco de responsabilidad a la hora de anotar. Al descanso, el partido estaba abierto.

Tras el paso por los vestuarios, el choque cambió por completo. El Sant Lluís olvidó su juego disciplinado y solidario y se deshizo cual azucarillo. A la par, el Castellbisbal se creció y aupado por la grada se fue directo a por la victoria y asegurar la permanencia en la categoría.

El cuarto y último sobró por completo. El Castellbisbal siguió anotando a la carrera ante un Sant Lluis muy mermado que, sin embargo, tuvo unos minutos en los que reaccionó para al menos maquillar el resultado, pero en el tramo final los locales volvieron a apretar y al final la diferencia se incrementó en exceso.