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  • AE BOET MATARÓ 79
  • BÀSQUET MENORCA 67

El Bàsquet Menorca, que acusó las bajas, no pudo comenzar la temporada con una victoria, y víctima de su irregularidad sucumbió ante el UE Boet Mataró. Los menorquines completaron un primer y segundo cuarto muy buenos, en los que se mostraron siempre superiores a los catalanes y a los que endosaron una diferencia de más catorce puntos, pero tras el paso por los vestuarios, el guión fue otro bien distinto y poco a poco se fue diluyendo su ventaja hasta prácticamente desaparecer, por lo que su rival lo aprovechó para completar una remontada que hizo las delicias de su parroquia en el Eusebi Millan. Cabe destacar que tras el receso, los isleños tan sólo anotaron veinte puntos.

El equipó de Oriol Pagès desembarcó con la conocida baja por sanción de Jan Orfila, y la del bosnio Krtalic, más la de Pitu e Isma con molestias y sendas mujeres en el final de su embarazo, pero eso no impidió que saltara a pista mucho mejor que los locales consiguiendo marcar las diferencias en el primer cuarto (15-23).

El segundo cuarto resultó muy parecido al anterior y de nuevo los de Pagès supieron sacar partido al gran juego interior de Biel Torres y Matalí, amén de que Salvans mostraba acierto exterior. El Mataró sufría mucho en defensa y su juego de ataque no le daba para contrarrestar la diferencia.

En el reinicio del juego el Mataró salió a pista con otra actitud y con un cambio significativo en su táctica que resultaría decisivo en el devenir del choque; los mataronís comenzaron a defender de manera zonal y eso provocó un cortocircuito en el juego de ataque menorquín.

El Bàsquet Menorca comenzó a fallar más de la cuenta perdiendo la confianza y concediendo demasiado. Una vez que el Mataró remontó el partido se convirtió en un infierno para un equipo visitante que terminó desfondado y bastante desmoralizado (79-67).