Un partido colosal. Es el calificativo que en su preludio reclama el duelo que dirimen esta noche en Bintaufa el Hestia Menorca y el Real Murcia Baloncesto (20 horas), segundo y tercer clasificado respectivamente de la conferencia Este de LEB Plata. Una cita que deviene con el equipo insular enfrascado en una racha de seis victorias consecutivas (7/2 de récord) que le ha permitido escalar hasta las cercanías del liderato que ocupa el Bàsquet Girona (8/1), rebasando en ese tránsito a su adversario de hoy –lo que se consumó en la jornada anterior, con la victoria menorquina en Villarrobledo– y que se entiende, por los varios frentes que comprende, de tremenda trascendencia.
El primero de ellos, y para ambos contendientes, que en litigio está el conservar las mínimas posibilidades de disputar la Copa LEB Plata –que reúne a partido único, el 28-D, a los equipos que lideren cada una de las dos conferencias al terminar la primera vuelta–, lo que pasa, mutuamente, por ganar y aguardar un tropiezo del Girona –que se enfrenta al Prat, el cuarto y último equipo del Este con ‘chance’ copero. De vencer los gironins, tocará apelar casi a un milagro en la fecha de liga posterior para revertir lo que se intuye su condición de finalista.
Importancia
Al margen de la Copa, otra de las caras del partido es su notorio valor aritmético a efectos de la liga. El equipo de Oriol Pagès jugará para incrementar a dos su franja de partidos de ventaja en relación al Murcia (6/3), coyuntura quizá impensable solo un mes atrás, lo que repercutiría por extensión como un acelerón de consideración, hacia la A-1 –aunque nadie contempla la no clasificación del equipo insular entre los mejores del torneo para su segunda fase– y hacia el primer puesto del Este por elevación. Por último, suscribir su séptima alegría consecutiva significará para el Hestia Menorca, junto con prolongar el mejor lapso actual de toda la liga y preservar el invicto de Bintaufa en su quinta función, empezar a engordar su cuenta de registros de la segunda mitad de competición, puesto que los resultados de la primera fase contabilizan en la siguiente entre los equipos provenientes de la misma conferencia. Dado que la presencia de menorquines y murcianos en la criba por el título se entiende virtual, es también el basket average particular entre los dos lo que en la velada de hoy en Bintaufa se puede empezar a ganar –con la valía e impacto que arroja este hecho entre dos evidentes aspirantes al ascenso.
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