Alcácer. El joven goleador será uno de los alicientes en Bintaufa - Archivo

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Maó está en fiestas pero en el Sporting nadie se despista. Doble sesión de entrenamiento programada por el técnico Lluís Elcacho ayer y hoy -11 y 18 horas- y matinal el viernes previo al partido que el sábado jugará en Bintaufa a partir de las 18 horas ante el Valencia Mestalla.

Tras caer contundentemente en Orihuela el staff técnico sigue con su idea de que en casa se escapen los menos puntos posibles. Volverá al equipo Jeroni tras su sanción, se espera que Adrien Goñi tenga el beneplácito definitivo de la Federación para debutar y se está encima de las evoluciones médicas de Ton Alcover y Moyano. El capitán parece que es el que lo tiene más justo.

Un rival de los de solera

El Valencia Mestalla es uno de los equipos de solera de la Segunda B, aunque su inicio de temporada está siendo más que discreto. Ha sumado dos puntos en sendos empates -Lleida (3-3) y Andorra (0-0), ambos en casa- y perdió ante el Orihuela, 3-0.

El filial valencianista ha "muerto" de éxito, puesto que el técnico del primer equipo, Unai Emery, ha reclutado a dos de las tres jóvenes "perlas" del Mestalla: el portero portugués Cristiano Pereira y el mediapunta Juan Bernat, que solamente volverán al B en contadas ocasiones. En el caso de Bernat, Emery lo ha hecho debutar en Primera, ante el Racing, con tan solo 18 años.

El otro es el delantero Paco Alcácer. En Valencia saben -y Nike también- que tienen petróleo con este joven de 18 abriles que marcó dos decisivos goles para que la Selección Española Sub-19 se alzara con la Eurocopa de este año, ante Chequia.

Tanto es así, que el club valencianista ha decidido renovarle por tres o cuatro años, aumentándole significativamente sus emolumentos y, por supuesto, su cláusula de rescisión, ahora en 9 millones de euros. Se trata, por un lado, de conservar a un goleador que el año pasado marcó la friolera de 27 tantos -en esta lleva tres en tres jornadas, un hat-trick ante el Lleida- y, por otro, de alejar "moscones" como Arsenal, Liverpool o Bayern de Munich... O incluso el nuevo Málaga, el mismo club que, con los abundantes petrodólares de su nuevo propietario, se llevó a Isco a su tierra natal.