Polémica. El colegiado no decretó penalti en estas manos del defensa visitante a tiro de Sergio - Paco Sturla

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Con su empate frente al Collerense y la derrota del Felanitx el Mercadal certificó su permanencia en Tercera División por quinta temporada consecutiva. Con sangre, sudor y lágrimas, pero con el objetivo cumplido después de una temporada que empezó bien, pero que fue bajando de nivel a ritmo de bajas, lesiones y el desgaste sufrido por una plantilla corta y recortada económicamente. Pero bien está lo que bien acaba, y ahora por fin los de Yeray Rodríguez podrán disfrutar de tranquilidad en las dos jornadas que restan.

No fue tan placentero, porque el Mercadal debía ganar su partido y no lo consiguió porque volvieron los fantasmas de la ansiedad, o angustia incluso, cuando transcurrían los minutos y el gol, este golito salvador que tantos puntos le ha dado, no llegaba en medio de un partido trabado, trabajado y disputado palmo a palmo, aunque sin el aplomo que le permitiera superar a un Collerense rocoso. Los mallorquines, sin ninguna inquietud clasificatoria, iban a lo suyo, puntuar, porque nunca hizo lo suficiente para ganar.

Los primeros compases del choque engañaron. El juego fue rápido, sin reservas defensivas, más inquieto el Mercadal, más compacto, aún sin figuras el Collerense.

Unos y otros se repartieron los escarceos iniciales sin excesivo peligro, pero a partir del cuarto de hora todo quedó reducido a un toma y daca del que sobresalió una bolea de Sergio, en el minuto 31, que dio en el brazo de un defensor azul. Las protestas locales no valieron para el árbitro. La misma inhibidora decisión adoptó el colegiado en el minuto 48 cuando fue el Collerense quien reclamó unas manos rojiblancas en el área.

El buen fútbol continuaba brillando por su ausencia, solo Meliá y Jeroni sostenían las posibilidades del Mercadal, y el ramalazo con tintes de gol aparecía de cuando en cuando, como en un fuerte remate de Héctor que Flexas despejó a córner (66') o en una falta magnífica que lanzó Xisco y que desvió Cristian en una portentosa parada (73') en la única ocasión visitante.

Entonces se llegó a un final angustioso para el Mercadal, que puso entonces el alma donde no había juego y en el 89 una internada de Joel dejó en boca de gol a David Más que remató ajustado fuera. Todavía faltaba mucho que contar, porque en el 94 Meliá enganchó un tremendo disparo que se estrelló en el larguero, el rechace lo recogió Joel y cuando el gol parecía inminente remató flojo y Flexas desvió el balón lo suficiente para que no cruzara la línea de meta, luego Jeroni chocó con el portero y se organizó una tangana que terminó con su expulsión, exagerada por la jugada, y confusa por lo demás, cuando fueron muchos los que participaron en la tumultuosa disputa.

El partido se prolongó hasta más allá del 96´, el gol no llegó y el empate dejaba mal sabor de boca, pero faltaba la conexión de las siete, y con la derrota del Felanitx llegó el gran suspiro de alivio.