Enrich, ayer en Los Pajaritos de Soria, tras el entrenamiento. - S.E.A.

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Este domingo por la tarde el Estadi de Son Moix del Real Mallorca vivirá una visita muy especial. La del que fuera su jugador durante años, Sergi Enrich, ahora delantero del Numancia, de la Liga Adelante. Tras la rescisión de su contrato con el club palmesano en contra de su voluntad, el delantero ciutadellenc regresa a la que ha sido su casa desde siempre. Y pese a haber marchado de Palma por la puerta de atrás, Enrich asegura que no viaja a la Isla con ningún ánimo de revancha ni nada parecido. El jugador, que fue titular en el último partido del Numancia provocando el penalti y dio el segundo gol a un compañero en la injusta derrota 2-3 en Los Pajaritos ante el Recreativo, aseguraba ayer que el encuentro del domingo «será especial, sin duda, porque el Mallorca me lo ha dado todo para ser futbolista, y aprendí mucho como jugador y persona», admite. El delantero, que pese a acabar con molestias ante el Recreativo estará al cien por cien ante el Mallorca, recuerda que el equipo de Palma «me brindó la posibilidad de debutar en Primera División, cumpliendo mi gran sueño, aunque tengo claro que los últimos años ya no confiaron en mí», asiente.

El de Ciutadella, pese a reconocer que será especial jugar en Son Moix como visitante, manifiesta que no tiene que «demostrar nada al Mallorca ni a nadie. Hice méritos para estar en el club, y más en Segunda; marqué ocho goles en el 'Recre', y con el Alcorcón jugué la fase de ascenso a Primera». Por tanto, olvidado el club que dirige, de momento, Serra Ferrer, Enrich quiere ahora «demostrar al Numancia que no se equivocaron conmigo», admite.

«Si marco no lo celebraré»

Respecto al partido en sí, Enrich, que ha marcado dos goles en la Liga hasta ahora, asegura que si marca «no lo celebraré, pero sí dedicaré el gol a mi familia que vendrá a verme». El jugador ve en el Mallorca a un «gran equipo. Ahora está bien pero nosotros también y sabemos que con trabajo y humildad podemos sacar algo».