Pep Sansó, entre Mariona Caldentey y Cata Coll, este jueves en Palma, tras ser homenajeadas como campeonas del mundo. | Teresa Ayuga

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Pep Sansó mueve ficha. El presidente de la Federació de Futbol de les Illes Balears (FFIB) ha convocado una Junta Extraordinaria para la próxima semana con el 'caso Rubiales' en el centro del debate. El presidente quiere pulsar la opinión del fútbol balear en relación a todo lo sucedido después del beso del presidente de la RFEF a la jugadora Jenni Hermoso el pasado domingo tras la final del Mundial. Sansó, que estuvo presente en la Asamblea de la Federación en la que Rubiales se negó a dimitir, ha reiterado que el gesto realizado por Rubiales 'es reprobable' aunque de momento sigue en la directiva nacional.

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La intención de Sansó con la convocatoria de esta Junta es la de pulsar la opinión del fútbol balear en torno a este caso. No existe una unanimidad a la hora de valorar la continuidad de Rubiales en el cargo ni el futuro de la FFIB en el futuro organigrama de la RFEF. Cabe recordar que son varios los presidentes que han retirado su apoyo a Rubiales, como los de Cantabria, Las Palmas, Cataluña o Valencia que han presentado su dimisión.

Tampoco en el fútbol balear existe una opinión unánime. Mientras que Pep Barceló, entrenador del Manacor, realizó una defensa a ultranza de Luis Rubiales otros como Tolo Verd, presidente del Collerense y un hombre de peso dentro de nuestro fútbol, ha pedido abiertamente la marcha del dirigente andaluz al frente de la Española después de los sucesos que ha protagonizado.