Campeonas. El CV Ciutadella se proclamó campeón de Primera División Nacional Femenina en la temporada 2002-2003 - Archivo

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Menudo cuarto de siglo. El Club Volei Ciutadella cumple 25 primaveras con un estado de salud envidiable como prueba el techo alcanzado ayer, proclamándose subcampeón de la máxima Liga nacional femenina tras pelearle el título al Aguere. Una prueba más de un club que colecciona elogios de un modo silencioso, sin excesos y con trabajo, mucho trabajo. Si hay algo que caracteriza a la entidad que preside Cati Moll es la eficacia con la que envuelven cada uno de sus proyectos y que, hasta el momento, sólo ha entonado un ritmo 'in crescendo' que le sitúa, con los resultados en la mano, como uno de los dos mejores equipos de España en volei femenino. Casi nada.

Nace el Club Volei Ciutadella en el verano de 1985 en el patio del colegio público Joan Benejam. Algo parco, lejos de lujos innecesarios y en plan familiar. Nace un proyecto que ni por asombro soñaba lo que ha logrado hasta el momento. En el fondo parece el típico cuento de hadas. Un grupo de personas desinteresadas, que comparten una pasión por el volei deciden crear un club en Ciutadella. Un club que sólo ha dado pasos adelante y que cuando ha retrocedido, ha sido para tomar carrerilla y saltar cualquier obstáculo.

El equipo femenino de volei comenzó a despuntar en la temporada 1992-93, cuando se proclamó campeón de Balears y logró una plaza en Primera División Nacional Femenina, al acabar la fase de ascenso en segundo lugar. El CV Ciutadella debutó en la categoría de plata del volei nacional el 24 de octubre de 1993, en la pista del Pavelló Municipal d'Esports de Ciutadella.

Su periplo por Primera Nacional se prolongó tres años, hasta que en el 1996 descendió a Segunda Balear. Pero con un aplomo y una ilusión que caracteriza a las bermellonas, el Ciutadella se levantó de ese golpe y regresó a Primera dos temporadas más tarde, tras quedarse a las puertas del ascenso deportivo, cayó en el partido definitivo frente al Alga Sur Menor, por lo que una vacante en el grupo B sirvió para que cambiaran de categoría. Y le sentó de lujo al club ese ascenso, puesto que desde entonces no ha dejado huérfana de ciutadellenques las categorías nacionales.

De patricias a valerianas
En marzo de 2003 el CV Ciutadella ganó la Liga y consumió, en La Rioja, el ascenso a Liga FEV, la segunda categoría más importante de España y que por aquel entonces suponía un hito inimaginable.

El club dio un paso más profesional y encontró como patrocinador a la marca Patricia, que amparó al equipo desde el curso 2002-03. Se adaptó rápido entrenado por Bep Llorens a la competición, ya que en sólo cuatro temporadas el club logró lo impensable hasta ese momento: el ascenso a Superliga Femenina, de nuevo en Haro.

Codearse con la jet set del volei español obligó al club a profesionalizar todavía más su organigrama, para crecer y estar a la altura en tan exigente competición. Para el primer año el timón se cedió a José Manuel González 'Magú', que en la temporada del debut clasificó al equipo para el play off del título.

El segundo año fue más discreto con Hugo Jáuregui, pero en el tercero, ya con Adrián Fiorenza, el equipo acabó subcampeón de la Copa que organizó, semifinalista de la Liga y clasificado por primera vez en la historia del deporte insular para una competición europea. , donde debutó este curso.

Y el cuarto... hasta ayer, más de lo mismo con el subcampeonato, la final de la Supercopa y el orgullo del nombre que pasea por todo el país, Francia y Europa. CV Ciutadella, Patricia Volei, Valeriano Allés... Distinto maquillaje pero siempre alma de superación.