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Mientras Sergi Llull se encuentra afrontando la cita baloncestística más importante de su vida, el Mundial de Turquía, su hermano Iván sueña con emular al mayor de los Llull, con un recorrido similar al que en su día hizo Sergi, con las ideas claras. "Sé que es difícil llegar a lo máximo del baloncesto, pero tengo que trabajar mucho y tener algo de suerte. Eso lo tengo claro y no todo el mundo puede decir lo mismo". Iván, que fichó por el Sant Nicolau de EBA, ya ha debutado con el primer equipo, el Manresa y lo hizo ante el DKV Joventut, en un partido que recuerda el joven jugador con mucha ilusión, "al poder jugar contra deportistas que no hace tanto veía por la televisión, aunque una vez empezó el encuentro sólo pensé en jugar y hacerlo lo mejor posible".

Iván, uno de los héroes del regreso a la ACB del Menorca Bàsquet, lleva tres semanas entrenando en Manresa. "La primera la dedicamos al perfeccionamiento individual para los más jóvenes", un aspecto que trabajó duramente la temporada pasada con Joan Junoy y Gaspar Roure, "mientras que las otras dos hemos ido acumulando volumen de trabajo aunque tenemos a media plantilla haciendo la pretemporada con el primer equipo", el Assignia Manresa.

El menor de los Llull se incorporó a un equipo vinculado al Manresa, como ya hiciera su hermano en la temporada 2003-2004, con el objetivo "de seguir creciendo como he estado haciendo hasta ahora, pero como tuve que salir de Menorca por motivos académicos, el aspecto que más me importa ahora, creo que tengo una gran oportunidad en el Sant Nicolau". Ahí está a las órdenes de Josep Riera, técnico que también está en la dinámica del primer equipo de ACB.

"Somos un equipo joven por lo que no tenemos roles adjudicados antes de temporada, creo que se irá viendo a medida que transcurra el año; Riera me ha pedido que juegue como sé y que aprenda todo lo que pueda", admite el joven base de 18 años, que reconoce que "algunas personas que están aquí en Manresa me recuerdan de cuando era 'un retaco' y venía a ver a Sergi, y me aseguran que he cambiado mucho; es normal que me hablen de mi hermano y para mí es un orgullo".

Iván vivirá esta temporada su primera experiencia lejos de casa después de abandonar Menorca para iniciar los estudios de INEF, actividad con la que compaginará el baloncesto. "Creo que los estudios son muy importantes y si tengo la suerte de poder llevarlo a la vez que el baloncesto sé que disfrutaré mucho". "En Manresa todo el mundo me ha recibido muy bien y estoy muy contento porque veo que la gente de aquí se preocupa por mí y para que no me falte de nada, ni me extrañe de mi familia, ni me encuentre solo", explica el base del Sant Nicolau.

"España va a más"

Para el menor de los Llull, la Selección española de baloncesto "no ha tenido un buen arranque en el Mundial de Turquía, pero creo que está yendo a más en una dinámica similar a la que ya mostró el verano pasado en el Europeo de Polonia, como le pasa a Sergio Scariolo con todos sus equipos". Sobre el importante reto que tanto su hermano como el resto del equipo va a afrontar estos días, Iván reconoce que "la selección se crece en los partidos importantes y seguro que lo harán bien".

Sobre su hermano, Iván admite que "Sergi sale de una lesión complicada y puede que esté afectado psicológicamente para evitar una recaída, pero creo que, al igual que España, cada vez aporta más y ante Grecia hizo su mejor partido; ahora debe seguir mejorando para llegar lo más lejos posible".

En su facebook, Iván reproduce una conversación que demuestra lo que siente por el baloncesto:
- ¿Qué es?
- Un sueño
- A mi me parece una pelota de baloncesto...
- Eso dicen todos antes de jugar.