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Hay tantas preguntas como certezas e intuiciones en este club, en esta plantilla, en esta afición. Si no media un milagro, si no se cumple el único requisito que demandan los jugadores de cobrar lo que se les debe, el partido de este mediodía en el viejo Bintaufa ante el Reus Deportiu puede ser el último de esta liga para el Sporting. No viajarán a Dénia, y de no jugar otro partido, se acabará todo. A pesar de los esfuerzos, a pesar de la derrama, a pesar de lo que sea mientras el plantel no tiene noticias de la junta y el presidente no atiende al teléfono.

Lo de hoy va a ser otra muestra de orgullo profesional. Ellos, los jugadores, los técnicos, cumplen con su trabajo y han cumplido con todo lo que se les ha pedido. Además, son agradecidos. Saben que el socio, que es digno y quiere un club digno, también ha hecho un esfuerzo. Les darán las gracias e intentarán ganar para ellos y para sí mismos. Hoy, especialmente, se van a dejar el alma.

Y el partido. A parte de todo, el equipo coquetea con la zona baja. Necesita ganar si miramos sólo los puntos. Decimocuarto con trece, únicamente tiene por debajo del peligro a Zaragoza B y Valencia B, con 12. Y luego, el abismo directo que marca el Manacor, con 11. Todo junto quiere decir que los tres puntos urgen.

Elcacho, siempre con los suyos, los quiere a todos en el campo y dará la convocatoria antes del partido. No podrá contar con los lesionados Eloy, Barber y Arkaitz. Vuelven los sancionados Raül Capó y Jeroni y a poco que pueda contará con Biel Medina.

Enfrente, este Reus Deportiu que acude con viejos conocidos (Marc Carrasco y Trujillo, el de los goles de falta directa), que empezó como un cohete la liga y que ahora no está tan bien: con la derrota ante el Andorra de la semana pasada, encadena seis jornadas sin vencer y tan sólo ha obtenido 4 de los últimos 18 en juego, a pesar de estar a un único punto del cuarto (es 8º con 19).

La racha del Sporting no es mucho mejor (cuatro puntos en las últimas seis jornadas). Pero, ¿quieren decir que eso ahora es lo más importante?. ¿A qué no?.