Paco Vallejo, durante una partida | Efe

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La Final de Maestros de ajedrez del Grand Slam, ganada con anticipación por Viswanathan Anand, concluyó la con la pérdida de la imbatibilidad del jugador indio ante el armenio Levon Aronian y la victoria del menorquín Paco Vallejo. Resueltas las seis rondas del torneo, Aronian quedó a solo un punto de Anand y Vallejo igualó en puntuación a Ruslan Ponomariov en una competición en la que todos supieron ganar al menos una partida y todos fueron vencidos como mínimo en una ocasión.

Aronian (ARM)-Anand (IND). Gambito de dama, defensa Dragozin, una fórmula de juego, quizá, la más jugada. Anand logró cierta ventaja con su pareja de alfiles, un poder contrarrestado por la presión del material de color blanco en el centro del tablero. El pentacampeón del mundo -actualmente sin corona-, Anand, tuvo dos déficits: un rey sin apenas protección y una estructura de peones poco compacta. Pese a ello no se angustió. Hacia el final, el armenio hizo más patente la debilidad del rey negro. Anand aumentó la ventaja del rival al no jugar torre f7 y en 43 jugadas y 3 horas 40 minutos quedó certificada la derrota del hasta entonces invicto líder.

Vallejo (b)-Ponomariov (n). El jugador balear, manejando las blancas, salió decidido a vencer para dar un 'cambiazo' a su rumbo poco satisfactorio. Después del planteamiento de una defensa Nimzo India se jugó la variante Capablanca, bautizada así en honor del as cubano; así pues, una partida de aspecto estratégico y de ritmo lento.

Declarada la lucha por las casillas blancas, los jugadores reflexionaron pausadamente, tanto, que ambos comprometieron su suerte en el encuentro con el siguiente panorama: un tablero rebosante de piezas y sólo 30 minutos, en el caso de Vallejo, para pasar el control de las 40 jugadas, y tres minutos más a disposición de Ponomariov. Paco Vallejo, que llevó la iniciativa, pareció acariciar su primer triunfo y sus posibilidad crecieron cuando el ucraniano tomó en c3 en lugar de un previsible alfil b7.

El menorquín hizo un buen papel en el flanco de dama; lamentablemente oscurecido por sus apuros de tiempo, pero superado el control Vallejo se despidió de la competición con un triunfo en 3 horas 29 minutos y 43 movimientos por bando.