Varios corredores, durante una prueba celebrada en la Isla. | G. ANDREU

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El deporte, tanto en lo que refiere a la práctica competitiva como en lo que concierne al seguimiento e interés que despierta entre la población, sigue siendo un territorio de evidente hegemonía masculina en nuestra Isla, según se desprende del informe elaborado por el departamento de Deportes del Consell, enmarcado dentro del proyecto Ona.

Este estudio de hábitos y motivaciones sobre la práctica del deporte en Menorca, llevado a término sobre una muestra de 988 encuestados (496 hombres y 492 mujeres) y entre un segmento de la población comprendido entre los seis y los 76 años, ilustra que el 73 por ciento de los practicantes de algún deporte de competición en la Isla son hombres, mientras que apenas un 27 por ciento son mujeres.

Asimismo, el informe desvela que de la población insular que no se dedica a ninguna actividad deportiva, el 64 por ciento son féminas, ante el 36 por ciento de hombres.

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El documento alude igualmente a las diferencias en lo que atañe al nivel o grado de interés que generan los acontecimientos deportivos, ya sea en su asistencia a los mismos o en su seguimiento a través de alguna plataforma mediática, entre hombres y mujeres. Así, el promedio de puntuación al respecto por parte del ‘sector masculino’ es de 8 sobre 10, por cero de las féminas. El informe del Consell, en ese apartado, recalca que los hombres acuden a presenciar los eventos deportivos en función del interés de estos en sí. Por su parte, en las mujeres, prevalece la motivación de acudir a contemplar alguna cita deportiva para dar soporte a sus hijos o nietos.

Pocos cambios

En otro apartado, el informe del Consell concluye que un aspecto que confirma «que pocas cosas han cambiado» en relación a decenios anteriores en los roles masculino y femenino es la causa por la que ellos y ellas rechazan dedicar su tiempo al deporte. En esa línea, los hombres razonan de que optan por dedicar su tiempo de ocio a diversión y entretenimiento. En cambio, las mujeres arguyen que su tiempo libre deben destinarlo, en lugar de al deporte, a las obligaciones familiares. El deporte en Menorca, cosa de hombres, según desvela el estudio del Consell.