TW
0

La cabeza de la jugadora hispano-brasileña Sheila D'Amaro va a mil por hora estos últimos días. La bermellón escuchó anteayer como el entrenador del CV Ciutadella de la Superliga femenina Bep Llorens le anunciaba que por ahora no cuenta con ella en el tercer proyecto del ciutadellenc en la banqueta del primer equipo menorquín. Un extremo que hasta cierto punto cogió totalmente por sorpresa a D'Amaro, una de las jugadoras destacadas estas dos últimas temporadas en el Pavelló.

La brasileña, que esta pasada temporada ha actuado como jugadora polivalente– compartiendo protagonismo con las otras centrales del equipo, Ester Marquès e Irene Cano–, se ha visto obligada a tener que cambiar el chip de manera automática a la hora de pensar en la próxima temporada. D'Amaro, que siempre ha demostrado su interés e ilusión por seguir en la Isla, quiso dejar claro ayer en «Es Diari» que desde ayer «mis prioridades de futuro cambian radicalmente. Si hasta ahora mi primera opción era cumplir mi tercer curso en el CV Ciutadella a las órdenes de Bep Llorens, ahora priorizaré centrarme en las opciones del extranjero».

Y es que la jugadora, con residencia en Ciutadella y a donde piensa volver a vivir si finalmente abandona la Isla, sabe en palabras de su representante que cuenta con interesantes ofertas de Francia y Alemania, de las dos superligas. Propuestas que tientan a Sheila D'Amaro tanto deportiva como económicamente. La central, todavía en Menorca por motivos laborales– pese a no cerrar para nada la puerta a que Bep Llorens le lance finalmente una propuesta de renovación en función de cómo vaya perfilando la plantilla– admite que las ofertas que le llegan del extranjero «son muy interesantes. Me permiten seguir jugando a un nivel muy alto y además con una ficha económica sumamente interesante», sostiene. De cara a un hipotético cambio de ideas en la mente del entrenador ciutadellenc y que en ellas entrase D'Amaro, ya advierte la brasileña que «por el mismo dinero que el año pasado no dudaría para nada a renovar supongo. Pero no creo que me plantease continuar si la oferta económica fuera notablemente inferior. Me quedan unos pocos años todavía de jugar al voleibol y los quiero aprovechar en todos los sentidos; en la pista y también en el sentido económico», reconoce D'Amaro, que llegó el curso 2011-12 a Ciutadella, fue antes compañera de Ester Marquès en el Gh Ecay Leadernet.