Imagen del partido de este sábado en el Pavelló ante el Sant Cugat, con el tándem argentino, Westergaard-Hiruela.    | Gemma Andreu

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Con la velocidad de crucero que anda demostrando en esta segunda vuelta de la Liga Iberdrola y que pudo corroborar este pasado sábado en el Pavelló Municipal de Ciutadella ante el difícil CV Sant Cugat– en uno de sus mejores partidos del curso– el Avarca Menorca debe lidiar esta noche una de las salidas más complicadas que entraña la Superliga, el feudo del CV Kiele, en Socuéllamos. Es el primero de los dos aplazados en su día por el brote de covid-19 que deben afrontar este febrero las de Bep Llorens, empezando por esta noche (20h), en partido suspendido de la décimo sexta jornada liguera. Un encuentro que iban a disputar castellanas y menorquinas el pasado sábado 29 de enero en el Pabellón Gran Gaby y que se aplazó tras confirmarse nuevos casos de covid-19 en la plantilla bermellón.

Partido el de esta noche que llega con sensaciones muy diversas entre el Kiele del ex Valeriano Allès Menorca, Chema Rodríguez, y el Avarca, lanzado en esta segunda vuelta a por la cabeza de la tabla clasificatoria. Las de Socuéllamos vieron como su último partido en casa ante el Leganés madrileño se aplazaba por coronavirus en el conjunto visitante. Sin jugar este pasado sábado, el último referente para las del técnico manchego es el severo correctivo recibido en casa ante el Haro Rioja (0-3).

De cara a este interesante y atractivo partido de esta noche, una de las grandes noticias del sábado pasado fue la ‘vuelta’ de la capitana, Maira Westergaard, en su mejor versión, con 20 puntos y liderando a las suyas. De camino a Socuéllamos decía la de Santa Fe a este diario estar «muy feliz de volver a estar a mi cien por cien y con buenas sensaciones, muy motivada para lo que nos viene», expresaba, muy satisfecha por el papel del equipo en general, «que hizo un gran partido, con acierto. El trabajo se notó y es clave, siendo tres puntos muy importantes», dijo, mencionando la llegada de su paisana, Camila Hiruela, «para rotar, que da calma», dijo.

Para Westergaarg, tras una irregular primera vuelta, «el equipo se va afianzando, pasando de un estado crítico a mirar hacia arriba. El trabajo e intensidad se notan y dimos un paso adelante y cuando estamos sólidas y a cien por cien podemos pelear por arriba claro», subrayaba, con la mente en el Kiele. «Un partido al que vamos con muchas ganas y a la vez conscientes de la dificultad de ganar en esta pista», avisaba la argentina. «Estamos trabajando para regresar con los tres puntos y sabemos que será un encuentro muy disputado, en el que deberemos estar muy atentas», avisaba.

En palabras de la MVP de esta última jornada doméstica, prevé un partido «táctico y que hemos estudiado muy bien. Sobre todo debemos mantener esta intensidad y actitud del Avarca, algo fundamental en un partido, insisto, que va a ser muy duro», repetía Westergaard. La idea menorquina, «vencer para seguir sumando y estar en lo más alto de la clasificación. Es lo que buscamos, respeto a la primera vuelta y que no tuvimos, buenas sensaciones». Ello con el lema de mejorar y «confío de lleno en el Avarca, empezando por esta noche, que sería muy interesante poder ganarlo».

Un rival falto de ritmo

La Liga Iberdrola y el voleibol del máximo nivel femenino volvieron la semana pasada a Socuéllamos, al Gran Gaby, en fecha atípica, el pasado día 2. Fue tras el parón navideño y los aplazamientos por covid-19 que han ido retrasando la competición para las de Chema Rodríguez, que han encadenado casi un mes sin competir por culpa de la pandemia. Y regresó tropezando en casa ante Haro (0-3), con una variante importa