La protección se pide concretamente para el recinto rocoso, de 5 hectáreas de extensión. Se divide en dos partes, una zona de canteras excavada a cielo abierto desde el siglo XIX para extraer marés, conectada por caminos; y otra zona, formada por dos grandes canteras de extracción mecánica, que estuvieron activas entre 1960 y 1994. Estos espacios se conforman actualmente como un lugar abierto al público donde se realizan obras de creación artística en marés y actividades lúdicas y didácticas, como el festival Pedra Viva, en verano. En el recinto se encuentran distintos elementos relacionados con la extracción de piedra, como una máquina regatadora, rieles o una máquina de cortar cantones, en la cantera del Laberint. Existe también un antiguo aljibe en uno de los jardines y dos casetas en las que se guardan una máquina de serrar y una máquina con cinta para cargar las piezas, aunque algunos de estos elementos están deteriorados.
El recinto está, en general, bien conservado y para que siga así se le aplicará la ley de patrimonio histórico de las Balears y todas las actuaciones, excepto las obras de conservación y reparación, deberán ser autorizadas por el Consell.
La solicitud de declaración de interés general fue presentada en 2009 por la Fundació Líthica,, usufructuaria del bien, y se dieron los primeros pasos en el mes de marzo de 2016.
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