Un crucero en el puerto de Maó, la temporada pasada. | Gemma Andreu

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Unidas Podemos Menorca (UP) ha propuesto un impuesto a los turistas de cruceros, como contraprestación al impacto medioambiental que ocasionan estos buques.

La candidata de UP al Parlament por Menorca, Cristina Gómez, se ha mostrado partidaria de cobrar un impuesto a cada turista y considera que los efectos de la llegada de centenares de cruceros en Balears disparan las emisiones contaminantes, además de aumentar el consumo de agua y energía.

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«En el caso de Menorca, el impacto es todavía mayor, y cabe recordar que venimos de una última temporada donde los municipios del levante de la isla han realizado llamamientos por la falta de agua. Precisamente, el dinero que dejaría el turismo de cruceros podría destinarse a acciones o inversiones relacionadas con la gestión del agua», ha enfatizado.

Por otro lado, Gómez ha recordado que algunos cruceros que han atracado contaminan el equivalente a 19.000 coches. «Debemos exigir a las navieras que dejen atrás el fuel y apuesten por sistemas más sostenibles. El turismo es importante, pero no a cualquier precio. ¿Tenemos que llenar los depósitos de estas ciudades flotantes y no podemos hacer pisos de dos plantas por falta de agua?», ha preguntado. El puerto de Maó recibirá en 2023 un total de 31 escalas más que el año pasado.