"Mevis" - Elena

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Autoficha
Me llamo Bartomeu "Mevis" Pons Pons y tengo 59 años. Nací en Sant Climent pero vivo en Maó. Descubrí que tengo un don para ayudar a curar a los demás mediante la imposición de manos y la energía y me dedico a ello desde hace 30 años. Mis aficiones son la pesca con caña y el campo.

¿Qué es exactamente lo que usted realiza?
Se llama magnetismo curativo y se basa en curar o ayudar a curar mediante las manos, o su imposición, y la energía personal de quien las usa. Si la mente me lo pide, también puedo utilizar algún preparado natural pero en general no suelo hacerlo. No cobro nada por esta labor, sólo la voluntad.

¿Cuándo se dio cuenta de que poseía esta capacidad?
Fue hace 30 años. Me di cuenta de que tenía el don, que es de nacimiento y hay que descubrirlo, cuando tuve una experiencia en Torralba d'en Salord. Me hice una herida en la cabeza y me curé yo mismo con mis manos. Decidí acudir a varias personas de Barcelona para que me mostraran qué camino debía seguir y después continué solo. Empezó a venir gente a mi casa a solicitar mi ayuda.


¿Qué le diría a todos aquellos que no creen en su labor?
Yo no busco a nadie, las personas son quienes me llaman. He curado animales, lo cual es más fácil que a las personas porque no traen ninguna predisposición. Hay quien viene simplemente buscando alivio. Yo respeto toda creencia.

¿Le ha ocurrido alguna anécdota que pueda contar?
Una vez me llamó un hombre a las 2 de la madrugada con un dolor de muelas insoportable. Le pedí que no colgara y que me diera su nombre y la fecha de nacimiento. Inicié mi ritual y le dije que ya no deberían dolerle más las muelas. Así fue, inmediato. Al día siguiente, recibí un sobre en mi casa con una recompensa, lo cual demuestra que funcionó. También hubo un caso en el que saqué la energía negativa de una casa en la que todo marchaba mal. Esa verídica historia puede leerse en el libro "Menorca Mágica".

¿Cómo se plantea el futuro?
Me gustaría seguir ayudando hasta que pueda. Ahora mismo estoy en baja forma por lo que guardo la energía para mí mismo. Los únicos días en los que no trabajo es en Semana Santa porque es un periodo especial en el que se produce una renovación de energías y uno no se encuentra con fuerzas. El resto del año estoy disponible para ayudar en lo que pueda a todo aquel que lo necesite.