El pasado 21 de enero, quien entonces era conseller de Medi Ambient del Govern balear, Miquel Àngel Grimalt, anunció en Menorca que se había llegado a un acuerdo con la empresa Ferrovial para fijar el coste de las obras del dique de Ciutadella. La cifra pactada entonces era de 59.793.395 euros, o lo que es lo mismo, un 19 por ciento más del precio por el que se adjudicaron las obras. Este acuerdo permitía al conseller no rebasar el límite legal de encarecimiento de un contrato público del 20 por ciento, puesto que el aumento acordado era del 19 por cien. Entonces, no obstante, Grimalt ya avisaba: este precio dejaba al margen posibles proyectos complementarios al original del dique. Y precisamente uno de estos proyectos permitirá a Ferrovial ingresar más de esos 59,8 millones pactados.
En concreto, el Ejecutivo autonómico ha adjudicado a Ferrovial las obras de suministro y colocación de bloques para reducir el rebase del dique, una actuación que tiene un período de ejecución de diez semanas y que ha sido adjudicada por 1.986.021 euros. Se trata de una obra complementaria, no contemplada en el proyecto original, y destinada a minimizar el oleaje en el arranque del dique. Desde Ports de les Illes Balears avanzan que "son proyectos diferentes", pero no hay duda de que el adjudicatario vuelve a ser Ferrovial.
De esta manera, a los 59.793.395 euros que se habían pactado entre Ejecutivo y empresa, hay que añadir ahora estos casi dos millones de euros más, de tal manera que el montante que va a recibir la constructora asciende a 61.779.416 euros. Y si se compara esta cantidad con el precio inicial de adjudicación (50.246.550 euros), la evidencia es que Ferrovial obtendrá un 22,9 por ciento más de dinero que el previsto inicialmente, es decir, 11,5 millones de euros más. No obstante, cabe resaltar que la fórmula mediante la cual Ferrovial alcanza este montante es legal, puesto que este importe llega a través de dos adjudicaciones diferentes.
Ferrovial quería más
El coste de las obras del dique de Ciutadella supuso en su día una dura negociación entre la empresa concesionaria y el Govern balear. Un año atrás, la empresa se plantó ante el Ejecutivo autonómico, argumentando que las obras reales tenían un coste muy superior al que se había presupuestado. Algo que amenazó con parar las obras de uno de los proyectos estrella del Govern. Entonces, el entonces vicepresidente de Ports, Manuel Patiño (Unió Mallorquina) y el conseller Miquel Àngel Grimalt (UM) se enfrascaron en una hermética negociación con la empresa. No obstante, este periódico pudo saber que la cantidad que pedía Ferrovial era de 93.355.814,70 euros, o lo que es lo mismo, un 85 por ciento más del presupuesto de adjudicación. Finalmente, la negociación acabó con el anuncio de Grimalt en un acto de presentación de un libro del acuerdo por el que se pagaría "solamente" un 19 por ciento más a Ferrovial.
A día de hoy, el importe de la factura final de construcción del dique de Ciutadella sigue siendo una incógnita, puesto que a estos ya seguros 61,7 millones habrá que añadir el coste de la estación marítima, la prioridad actualmente de Ports de les Illes Balears.
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