Asamblea. Miguel Ángel Carlos, Pereira y Pelarda - P. UGT

TW
0

Los sindicatos han desenterrado el hacha de guerra contra la reforma laboral que generaliza el despido de 33 días por año trabajado y que según UGT representa "el mayor recorte de derechos sociales de los últimos 30 años" de democracia. El primer asalto tendrá lugar el 30 de junio, una especie de ensayo de la huelga general prevista para el 29 de septiembre. Sin embargo, ayer mismo ya comenzaron a calentar motores con la celebración de una asamblea informativa sobre los efectos de la reforma, que se repetirá en todas las empresas de la Isla con más de 50 trabajadores para culminar con un llamamiento a la movilización.

En las instalaciones de UGT, el secretario de acción sindical de Balears, Manuel Pelarda y el secretario de organización, Miquel Ángel Carlos, acompañados por el secretario general de UGT Menorca, Servando Pereira, motivaron el por qué del "rotundo rechazo" de este sindicato a la "profunda y radical" reforma laboral del Gobierno Zapatero hecha "al dictado de los empresarios de la CEOE". En opinión de los dirigentes sindicales, la reforma abre la puerta al despido libre, judicializará más la relaciones laborales y ataca la concertación social al permitir la ruptura unilateral de los convenios colectivos por parte del empresario en temas salariales. Los representantes sindicales de UGT aseguran que la reforma es "un torpedo contra la línea de flotación del SOIB" al permitir la creación de empresas de intermediación laboral con ánimo de lucro. "El trabajador que quiera trabajar deberá pagar", critican, al tiempo que indican como, a partir de ahora, las empresas de trabajo temporal también podrán entrar en el sector de la construcción y servicios públicos, ámbitos que tenían vetados.

Asimismo, los sindicalistas afirman que la reforma laboral incrementará aún más la contratación temporal en lugar de penalizarla, al permitir a los empresarios contratar "de forma encadenada" a diferentes trabajadores para hacer un mismo trabajo. "La contratación se mantiene con un mínimo de tres años ampliable a uno más, y aunque la indemnización de ocho días por año se amplia a 12, esta no se aplicará hasta 2015. Ahora se despedirá más y más barato", advirtió Manuel Pelarda.

"Triunfa el modelo de Díaz Ferrán"
Los sindicatos recuerdan que el propio ministro de Trabajo, Celestino Corbacho, reconoce que la reforma laboral no bajará la tasa de temporalidad actual del 25 por ciento, "que casi triplica la europea" y en cambio sí abrirá la puerta al despido de 20 días por año trabajado y al despido expres sin justificación. "Un empresario podrá despedir a un trabajador de forma improcedente y encima la Administración le dará un premio. Se hará cargo de ocho días de indemnización a través del Fondo de Garantía Salarial (FOGASA)", remarca Pelarda. "Ha triunfado el modelo Díaz Ferrán, del empresario que no paga a sus trabajadores, que los despide cuando quiere, que traslada al FOGASA las indemnizaciones y que, si puede, vende su empresa a un tiburón", espeta. El sindicalista advierte que a la reforma laboral le seguirá la reforma de las pensiones y hace un llamamiento para pedir responsabilidades a los diputados menorquines en el Congreso, especialmente a los socialistas. "El voto que le dio la clase trabajadora no es un voto en blanco para recortar derechos sociales", denuncia.