Dos ciclistas mueren arrollados por un coche

El siniestro se produjo alrededor de las 7.30 horas cuando un turismo que circulaba en dirección a Maó, y en el que viajaban dos jóvenes de 21 años, se desvió al carril contrario y atropelló a un grupo de cuatro ciclistas, todos ellos menorquines. Posteriormente, el vehículo colisionó contra una valla de seguridad y se prendió fuego, aunque sus ocupantes pudieron salir del coche por su propio pie y resultaron heridos leves.

Los dos ciclistas, Juan Garriga Carreras y José Antonio de Tena Naranjo, de 59 y 48 años respectivamente y vecinos de Maó, fallecieron en el acto a causa del fuerte impacto, mientras que sus compañeros, que sufrieron heridas leves, fueron trasladados al Hospital Mateu Orfila de Maó.

Uno de ellos, P. F. S de 40 años de edad y natural de Maó, sufrió un ataque de ansiedad y fue dado de alta a lo largo de la mañana. El otro ciclista herido, L.G.B de 46 años y vecino de Alaior, presentaba una fractura del tobillo izquierdo y permanece ingresado en el centro sanitario aunque, por el momento, no será intervenido quirúrgicamente, según señalaron ayer fuentes del hospital.

También fue atendido en el 'Mateu Orfila', el conductor del vehículo, residente en Barcelona, por un choque traumático y un esguince cervical de los que fue dado de alta durante la misma mañana.

INTERVENCIÓN
Todavía se desconocen las causas del siniestro aunque, según testigos presenciales, la ausencia de marcas de frenada en el asfalto podría indicar que el conductor del turismo se quedó dormido al volante. Por su parte, el director insular de la Administración General del Estado, Javier Tejero, indicó que, debido a la aparatosidad del accidente, es probable que los jóvenes circularan a una velocidad superior a la permitida en la zona, que es de 90 kilómetros por hora. Tejero matizó que la Guardia Civil está investigando las posibles causas del siniestro y apuntó que, por el momento, se desconoce el resultado de las pruebas de alcoholemia y estupefacientes practicadas al conductor del vehículo.
El alcalde de Alaior, Pau Morlà, que se desplazó hasta el lugar de los hechos, hizo hincapié en las dificultades con las que se encontraron los efectivos policiales y de la Guardia Civil a la hora de identificar los cuerpos ya que, debido a la fuerte colisión, quedaron "totalmente desfigurados". Asimismo, explicó que, mientras uno de los fallecidos quedó tendido en la cuneta de la carretera, el otro se encontró entre unos arbustos, lo que dificultó su localización en un primer momento.

El alcalde aseguró que el turismo, de color blanco, pertenecía a una empresa de alquiler por lo que es probable que los dos jóvenes se encontraran de vacaciones en la Isla.
Los dos ciclistas fallecidos pertenecían a la Penya Ciclista de Maó y, según algunos compañeros, solían encontrarse para ir en bicicleta los fines de semana. Precisamente ayer estaba prevista la celebración de una carrera ciclista en Llucmaçanes que fue suspendida por la organización tras conocerse la fatal noticia.