Varios propietarios de la urbanización ciutadellenca de Cala en Bosc han sido objeto de diversos hurtos en sus chalés en las últimas semanas, unos hechos que ponen sobre aviso recordando la oleada de robos que hubo la temporada pasada en otro núcleo turístico del municipio, Cala Blanca.
Uno de los afectados acudió a las oficinas de la Policía Local de Ciutadella en el Lago de Cala en Bosc para informar de la sustracción de numeroso material de trabajo y herramientas que guardaba en su lavadero y que fue robado durante el corto espacio de tiempo que tardó para ir a tirar la basura a un contenedor cercano a su chalé. En esos pocos minutos le robaron. Ya en su casa, instantes después y cuando aún no se había percatado del robo, el vecino sorprendió a un individuo merodeando frente a su puerta. Esa persona, que portaba una botella vacía en la mano, al ser descubierta, pidió agua al afectado, quien, al no fiarse por su apariencia, descartó ir a la cocina a por agua y se la ofreció del grifo del patio. Cuando el individuo ya se había ido, se dio cuenta que le faltaban numerosas herramientas pero ya no le localizó.
Otro de los casos detectados fue el de una persona a la que vieron mirando por encima de las vallas de los chalés. Pocos minutos después volvió a pasar de vuelta y cargando una gran bolsa sobre su espalda. Los vecinos que lo vieron salieron tras él, pero desapareció rápidamente. "Suponemos que tendrían el coche preparado para salir corriendo", afirman, temerosos de que este tipo de actos delictivos se conviertan en algo habitual en la zona.
Los vecinos de Cala en Bosc se quejan de la poca presencia policial en la urbanización. Recuerdan que en años anteriores era habitual que una dotación patrullara continuamente, algo que, aseguran, servía para disuadir a los ladrones o, por lo menos, les complicaba el robo.
Por otro lado, según fuentes de la Policía Local, también ha habido varios robos en las cajas de recaudación de máquinas infantiles, como los típicos caballitos y coches donde montan los niños. El "modus operandi" utilizado es el de romper la maquinaria aprovechando las tapas de las arquetas de telefonía que están en las aceras.
La Policía Nacional ha iniciado una investigación para esclarecer las denuncias presentadas.
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