El anuncio de una reducción en los descuentos de residente crea malestar

Opina que incluso si se reduce el descuento en los billetes en clase preferente será una medida que perjudicará a los residentes. "Muchas veces, los ciudadanos de Balears se ven obligados a coger un billete en clase business porque no hay ninguna otra plaza disponible si tienen que salir de las Islas de forma urgente o por causas de fuerza mayor, por tanto la medida sería perjudicial", señala. En el caso de Balears, el descuento del 50 por ciento por residencia se aplica en los vuelos interislas y con la Península. Sólo hay tres compañías con oferta de clase preferente: Air Europa, Iberia e Spanair, y en los vuelos con la Península, porque en las rutas interislas no existe. Silvia Riera añade que "a consecuencia de la crisis, ha habido menos pasajeros por lo que el Ministerio de Fomento se ha ahorrado las correspondientes subvenciones. No tiene sentido que el sistema de descuentos se modifique para penalizar la insularidad".

Para explicar como funciona el sistema con los billetes bussines en la actualidad, Riera pone el ejemplo de un simulacro de descuento en clase preferente vigente. El coste de un billete business ida y vuelta entre Palma-Madrid es de unos 800 euros. El descuento del 50 por ciento se aplica hasta la tarifa turista máxima, que es de 625 euros. A los 175 euros restantes no se les aplica la subvención.

Por su parte, el secretario general de PIME-Menorca, Pau Seguí, considera que el anuncio del Gobierno central "tiene su complejidad, porque los precios de los billetes no son los mismos incluso en un mismo vuelo. Si bien, toda delimitación del descuento es peligrosa porque puede encarecer el coste de los billetes para los insulares, para quienes el transporte es fundamental". Señala que si se plantea acotar el descuento en clase preferente no afecta a los vuelos interislas, porque no existe esta oferta, y en los vuelos a la Península "no suele contratarse la clase business para tres cuartos de hora de vuelo, si no es por necesidad de fuerza mayor y cuando no quedan plazas". En este caso, dice, sí sería perjudicial para los residentes. "A priori, no me parece mal que se elimine el descuento en clase preferente si se garantiza que los residentes tienen la opción de viajar en clase turista", comenta. Pau Seguí opina que "se dice que es una medida para atajar la picaresca de algunas compañías aéreas, esto me parece justo; ahora bien, que no se perjudique a los residentes". Pide que no se ponga un tope máximo para aplicar el descuento "porque los precios de los billetes fluctúan, incluso en un mismo vuelo, y a veces no queda otro remedio que coger el billete más caro".

El conseller Damià Borràs asegura que el Consell desconoce aún la fórmula que el Ministerio de Fomento quiere aplicar. "Pediremos toda la información y trabajaremos para que no desaparezca el 50 por ciento del descuento de residencia porque es una conquista a la que no podemos renunciar", dice. Añade que "ahora bien, si hay fraude o abusos por parte de las compañías que se benefician de forma indebida, el Ministerio debería poner los mecanismos de control, pero no a costa de modificar el descuento de residencia a la baja".