Maó. Tur y Mir colgaron en la fachada un lazo rosa. El Ayuntamiento obsequió a ALBA por su décimo aniversario - Gemma Andreu

TW
0

Rosa en las solapas, rosa en los pañuelos de fantasía, rosa en anillos y rosa en las fachadas de los edificios. Fue el color de moda, el color que hablaba de la feminidad, de la solidaridad y a su vez, de la esperanza. Y es que Menorca se unió ayer a la conmemoración del Día Internacional del Cáncer Mama con la celebración de una serie de actos simbólicos que este año llevaban consigo un valor añadido, el décimo aniversario de la Asociación de Mujeres Afectadas de Cáncer de Mama de Menorca, ALBA.

El Ayuntamiento de Maó amaneció ayer teñido de rosado y de la misma manera despidió el día. En el acto de homenaje a ALBA organizado por el consistorio mahonés el alcalde, Vicenç Tur, resaltó el orgullo de que la asociación naciera en Maó y haya sabido traspasar fronteras y ser pilar básico para todas las mujeres a quienes se les diagnostica la enfermedad. Tur obsequió a la presidenta de la asociación, Dolores Mir, con una miniatura de la fachada del Ayuntamiento "para conmemorar que ya llevamos diez años colgando el lazo rosa en el edificio".

A mediodía, el hospital Mateu Orfila acogió el acto central de la jornada con la lectura pública del manifiesto de la Federación Española de Cáncer de Mama (FECMA) a la que está adherida la asociación insular. Mir recordó que cada día se diagnostican en España 44 casos de cáncer de mama y destacó la importancia de la detección precoz de la enfermedad mediante campañas que deben de ser promovidas por el Sistema Público de Salud. Abogó a su vez porque no exista discriminación respecto a acceso a terapias y a medicamentos eficientes por razones de lugar de residencia y mostró su preocupación ante el incremento en la detección del cáncer de mama en mujeres jóvenes.

Dolores Mir agregó que "cuando a una mujer se le diagnostica cáncer de mama se le viene el mundo encima pero mi consejo es que se aferren a la vida con pegamento Imedio".
Pidió a su vez más apoyo en relación a la fisioterapia puesto que una vez operadas "el Servicio Público de Salud tan sólo cubre unas tres semanas de rehabilitación". Pidió a su vez que las mujeres tomen mayor conciencia de la importancia de las exploraciones puesto que "el temor de que se les diagnostique una enfermedad les hace dar un paso atrás y no acudir a las revisiones". El acto en el hospital finalizó afinando las voces para entonar el himno con el que se sienten identificadas las mujeres de ALBA. Cabe recordar que ALBA cuenta actualmente con 90 mujeres afectadas y otros 90 socios colaboradores.

"A una mujer que le diagnostican cáncer de mama le diría que de éste se sale"
Joana Sintes Gornés tenía 47 años cuando se le diagnosticó un cáncer de mama. El mundo se le vino encima. Luchó contra viento y marea y ganó el combate contra la enfermedad. Actualmente tiene 53 años y aunque recuerde con dureza aquellos meses de sufrimiento asegura haberse hecho fuerte y tener muchas ganas de vivir.

¿Cuándo se le diagnosticó un cáncer de mama?
Tenía 47 años y un día me noté un bulto en el pecho. Mi madre murió de un cáncer de mama y en seguida relacioné su caso con el mío. Me operaron en cuestión de 15 días y tuve que pasar por tratamientos de quimioterapia y radioterapia.

¿Y cuál fue su reacción tras confirmarse la enfermedad?
Se me cayó el mundo encima. Cuando te diagnostican un cáncer lo primero que haces es relacionarlo con la muerte. La verdad que poco tiempo antes del diagnóstico había pasado por dos situaciones bastante fuertes y complicadas de las que te parece que no vas a salir. Y cuando me diagnosticaron el cáncer me di cuenta que las dos anteriores no eran nada en comparación con ésta.

¿Cuál fue en su caso el momento más duro y complicado?
Sólo lloré una vez, el día que se me cayó el pelo y ahora me doy cuenta de que es la situación menos importante por la que debes pasar. Lo que realmente importa es la salud. A pesar de ello, creo que lo más duro fue cuando me dijeron que tenía cáncer puesto que aunque lo veas venir siempre tienes la esperanza de que será un bulto benigno. También es cierto que siempre me había parecido que la palabra 'oncólogo' era horrorosa porque la relacionaba con el sufrimiento de mi madre, con las veces que la tuve que acompañar al especialista. Ahora ya me parece algo de lo más normal. Por otra parte, a pesar de la dureza de tener que vivir la amputación de un pecho, nunca me supuso ningún problema, no me lo reconstruí porque lo más importante es la vida. Se hace complicado ver cómo la gente se hace aumentos de pecho y a ti te lo quitan pero en mi caso nunca ha sido motivo de preocupación.

Y supongo que la familia es un pilar fundamental para combatir la enfermedad.
A pesar de la dureza de la enfermedad sufrirla te sirve para descubrir cuánta gente tienes a tu alrededor que te quiere. Durante las sesiones de radioterapia en Palma estuve en un piso de ASPANOB con otras afectadas y yo solía bromear diciendo que aquello parecía Gran Hermano.

Una vez superada la enfermedad, ¿diría que la manera de ver la vida ha cambiado?
Muchísimo. Valoras mucho más todo aquello que te rodea. No discutes por tonterías y lo que a otros les parece un problemón para ti no es nada.

¿Las exploraciones y las revisiones médicas son fundamentales para parar la enfermedad?
Son vitales para que la enfermedad se coja a tiempo. Tengo que decir que unos investigadores han llegado a la conclusión de que en el 2040 el cáncer de mama estará erradicado.

¿Cuando decidió afiliarse a ALBA?
Cuando me diagnosticaron la enfermedad hace seis años. ALBA es la cara amable de la enfermedad, porque estamos las que lo hemos superado. Allí puedes explicar tu caso y sabes que quienes te escuchan han sufrido exactamente lo mismo que tú, que te comprenden. Al inicio de la enfermedad estás con los ánimos por el suelo y cuando ves a mujeres que ya lo han superado te da fuerzas para seguir luchando.

¿Qué le diría a una mujer a la que le acaban de diagnosticar un cáncer?
Que de la enfermedad se sale. Lo que no le diría nunca es que esto no es nada porque le estaría mintiendo.