Miguel Gómez Escudero - MG

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Autoficha
Me llamo Miguel Gómez Escudero, tengo 31 años y nací en Barcelona, aunque a los 5 años vine a Menorca con mi familia. En la actualidad vivo en Sant Lluís. Soy propietario de las peluquerías Mi Salón. Siempre he estado vinculado a este mundo, con el cual disfruto y aprendo cada día. Mis aficiones son el fútbol y pasear con mis perros.

¿Cómo y cuándo empezó su interés por la peluquería?
Desde pequeño estuve en contacto con este mundo porque mis padres eran propietarios de una peluquería. Así que para seguir con el negocio, con 16 años empecé a estudiar en la escuela de Llongueras de Barcelona. En la actualidad sigo formándome y formando a los demás con cursos diseñados por l'Oréal.

Hay gente que cree que los peluqueros nunca escuchan lo que los clientes quieren. ¿Es cierto?
Es un tópico eso de que nos dicen que cortemos un dedo y acabemos cortando un palmo. Hemos aprendido mucho con el paso del tiempo. Ahora sabemos personalizar, hacer lo que el cliente desea. Antes se ponía de moda un peinado y se lo "colocaban" a todo el mundo.

¿Cómo ha afectado la crisis al sector?
Lo vamos salvando, pero hay una sobrecarga de peluquerías en la Isla. Actualmente hay 63 en Maó y 67 en Ciutadella. Para competir bien nosotros ofrecemos un horario muy amplio.

¿Qué es lo último en peluquería?
Lo que ahora arrasa no es, curiosamente, ningún peinado. Es el tratamiento de queratina. Se trata de un modo de recuperación del cabello deshidratado por las agresiones externas tipo tintes y mechas.

¿Qué peinados de famosos se piden?
Se pide mucho el peinado de Sara Carbonero y el de Patricia Conde. Las dos llevan melena, nada especial. En realidad se fijan en su pelo porque son guapas. Los modelos han cambiado mucho. Años atrás lo que más me pedían eran los peinados de María Teresa Campos. Hoy en día ya no se lleva.

¿Cómo se peinan los menorquines?
No hay un estereotipo claro. Hay gente que quiere innovar y gente que no, que es la que más abunda. La mayoría busca sentirse cómodo y a la vez, verse favorecido.

¿A quién le gustaría peinar?
A la Princesa de Asturias, Letizia Ortiz. Le haría un peinado más moderno, le cortaría la melena tan típica que lleva. También le haría un cambio a Sara Carbonero.

¿Qué es lo que más le gusta de su trabajo?
El contacto con la gente es genial. Cada persona es un mundo y esto hace que la peluquería no sea un trabajo nada monótono. Siempre estás obligado a evolucionar. Nunca dejas de aprender.