TW
0

Un grupo de diez windsurfistas aprovechó la mañana de ayer para sacar las velas en Port d'Addaia, dada la tramontana con fuerza siete que sopló durante buena parte de la jornada. Cuál fue su sorpresa cuando se encontraron con un delfín muerto, el cual presentaba una profunda herida cerca del ojo izquierdo.

El ejemplar, de apariencia joven, medía 1,20 metros de longitud y parecía llevar poco tiempo en la zona. Cabe recordar que este es el cuarto cetáceo que se halla en menos de un mes, dos de ellos, con heridas similares.

Desde el GOB se ha mostrado preocupación por este hecho, ya que la agrupación asegura que no es normal. Este tipo de mamíferos viven lejos de la costa y el número de ellos que llega muerto a la costa es muy reducido. Aún así, todavía no puede lanzarse una teoría que explique qué puede estar sucediendo.

El GOB afirma que existen normativas para controlar estos sucesos pero, según informan, no hay personal suficiente para llevar a cabo las tareas de vigilancia suficientes.