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El Aeropuerto de Menorca vivió ayer una de las jornadas con mayor movimiento de aviones y pasajeros de la temporada estival registrando importantes retrasos en distintos vuelos procedentes de la Península e incluso del Reino Unido e Irlanda.

Destacó especialmente el vuelo Jkk 5690 de la compañía Spanair procedente de Madrid que acumuló casi tres horas de retraso sobre el horario programado de llegada a Menorca.

El avión, que debía de partir de Barajas a las 8,50 horas, no lo hizo hasta pasadas las 10,30 horas, con el agravante de que la mayoría de los pasajeros facturaron su equipaje pasadas las seis de la madrugada. La larga espera en la terminal madrileña se hizo interminable, según relataron algunos viajeros a su llegada a la Isla poco antes de las doce del mediodía.

Fuentes de la compañía informaron que el retraso fue motivado por un "problema técnico" en el avión que obligó a sustituir la aeronave y reprogramar el vuelo con destino a Menorca. "Estamos en temporada alta y los vuelos van completos, es difícil encontrar aviones disponibles", señalaron las mismas fuentes que aprovecharon para pedir disculpas a los pasajeros afectados.