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El Ayuntamiento de Ciutadella se verá obligado a convocar un tercer concurso para poder adjudicar los cines del complejo cultural del Canal Salat. Un informe jurídico municipal determina que no procede que el contrato se realice mediante decreto de Alcaldía a la única empresa presentada, Cines Canal Salat SL.

Esta había sido la solución planteada para resolver la explotación de las dos salas de proyecciones, después de que en el pliego de condiciones del segundo concurso se detectara una contradicción sobre la naturaleza jurídica de la empresa adjudicataria. Dado que sólo había una empresa presentada, el Ayuntamiento quería acelerar el proceso para que los cines pudieran abrir al público en breve.

El nuevo revés administrativo supondrá un retraso en la adjudicación de los cines, una demora de unos 15 días sobre la apertura prevista. De este modo, los cines podrían abrir en diciembre. El alcalde lamenta el nuevo inconveniente en el proceso pero afirma que "debemos cumplir escrupulosamente la legalidad y convocar un nuevo concurso".

José María de Sintas ha contactado con la única empresa presentada, después de que el primer concurso resultara desierto, para informarle de la situación. Todo apunta que Cines Canal Salat SL volverá a presentar oferta en esta nueva convocatoria.

El alcalde señala que se mantendrán las mismas condiciones para contratar la explotación de los cines. Esto es un canon anual de casi 42.000 euros, IVA incluido, por un periodo de 15 años, prorrogables.

Desde la inauguración del complejo cultural del Canal Salat, el pasado mes de mayo, los nuevos y flamantes cines han permanecido cerrados, excepto durante la proyección del ciclo "Mujeres de cine", dentro del festival internacional Mèdit.

De Sintas confía que a través del nuevo concurso quede resulta la explotación de los cines de forma definitiva y el público de Ciutadella pueda contar con una oferta de proyecciones digna, tras del cierre del Teatre des Born y que se dejara de proyectar en el auditorio del Casino 17 de Gener.

Actualmente el único cine a disposición de los espectadores está en el Teatro Salesiano, que explota la empresa Salpón.