Sant Joan como meta

En quince días, los elementos históricos quedarán desmontados. Entonces empezará la excavación arqueológica del subsuelo, así como marca la normativa al tratarse de un edificio catalogado y ubicado en pleno centro histórico de Ciutadella. Los responsables de la obra confían en que no haya sorpresas arqueológicas, teniendo en cuenta que el solar ya albergó una construcción anterior. La aparición de posibles hallazgos y la incidencia de la lluvia es a lo que más temen, por el grave revés que supondrían para cumplir el calendario de las obras.

Si se cumplen las previsiones, en las próximas semanas del Teatre des Born sólo quedarán sus cuatro paredes, después de que se hayan retirado todos los elementos de interés.

El director de obra y la Constructora San José SA se han puesto una primera meta, y ésta es Sant Joan. Es la fecha marcada para que la consolidación de la estructura quede finalizada, los forjados listos y la cubierta terminada para poder dejar la Plaça des Born libre para las fiestas.

El objetivo es que para entonces la zona de la plaza, que fue cerrada la semana pasada para facilitar las obras, quede desalojada para no interferir en los actos multitudinarios, como el Caragol des Born. Mientras tanto, la zona será ocupada por la caseta de obras, se instalará una grúa y se utilizará para el acopio de materiales.

"Esta primera fase será la más complicada de las obras y la más imprevisible por las mayores incidencias que pueda haber, pese a que deberemos ir contrarreloj. Una vez quede consolidada la estructura del edificio y el tejado quede terminado, el resto del proyecto vendrá rodado", afirma José María Forteza Oliver, director de la obra.

En el desmantelamiento se aprovecharán todos los materiales (bigas de madera, 'cantons de marès', tejas...) o bien para la misma obra o para el depósito municipal.

El responsable de Constructora San José SA, Pablo Suárez, explica que la intención de la compañía es subcontratar trabajos a empresas locales y estima que en fases punta podrá haber hasta 30 trabajadores en la obra.

Según apunta el director de la obra, como muy tarde, la reforma del Teatre des Born estará terminada en Navidad del año que viene. Añade que en su estreno, el público descubrirá un nuevo Teatre des Born con toda su estética original, con más amplitud y más luminoso. "Como debió ser el primer día de su inauguración", dice, allá por 1875.

La fachada volverá a ser la genuina, la platea tendrá de nuevo palcos y habrá un foso para orquesta. En la nueva planta sótano, debajo de las butacas, estarán los camerinos y los servicios. "Ciutadella recuperará con este proyecto su teatro más emblemático. Se cuidará mucho su acústica natural y será ideal para ópera, música de cámara y actuaciones teatrales. Será un teatro histórico rehabilitado, especial y único en la Isla", destaca el arquitecto.