Desaladora. La planta, un culebrón que parece no tener fin - Archivo

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El pasado jueves, los votos mayoritarios de la oposición en el pleno de Ciutadella aprobaron un acuerdo por el que se pide al Govern balear que aporte dinero para que, cuando la desaladora esté en funcionamiento, los ciutadellencs paguen un precio razonable por el agua producida en la planta.

Ayer, el director general de Recursos Hídricos del Govern balear, Salvador Padrosa, apostaba por otra opción antes que la aportación directa de dinero. Padrosa entiende que si se consiguen más consumidores para el agua desalada, ésta será más barata, puesto que los costes de funcionamiento de la planta se repercutirán entre más usuarios. Así, asegura que la primera opción del Govern balear es ahora mismo conseguir conectar la desaladora con Maó, pasando por todos los municipios de la Isla.

Padrosa calcula esta conducción en unos 20 millones de euros. "Ahora mismo no tenemos partida económica para asumir esta conducción, y por eso estamos negociando con el Ministerio de Medio Ambiente la posibilidad de que se haga cargo de esta inversión", recuerda Padrosa.

Dependiendo de las expectativas que se palpen en el Ministerio, el Govern estudiará si pone en funcionamiento la planta ya mismo, o si espera a tener conectada la instalación con otros municipios y, por lo tanto, con otros posibles clientes, para tener más compradores para el agua, pudiendo producir así un mayor volumen reduciendo los costes totales.

Ahora mismo, explica el director general, los técnicos de su departamento están estudiando el coste que supondría poner la planta en marcha en las actuales condiciones antes de decidir cuándo se empieza a producir agua. Cabe recordar que a partir de ese momento, el Govern tendrá que empezar a devolver a la empresa adjudicataria de las obras el dinero que ésta ha avanzado para construir la infraestructura.

¿Agravio comparativo?

En el pasado pleno, el PSOE recordó que el Govern aporta unos 300.000 euros mensuales a la desaladora de Andratx, lo que hace posible que la factura final que pagan los consumidores tenga un precio razonable. Interpelado sobre si no hacer lo mismo con Ciutadella podría suponer un agravio comparativo (tal como se dijo en el pleno), el director general de Recursos Hídricos del Ejecutivo autonómico responde que "no hay ningún agravio, porque los ciutadellencs no han tenido que pagar ni un euro de su bolsillo para tener una desaladora, a pesar de que ésta ya está totalmente construida".