Escoletes. Cuentan con el apoyo de los equipos de atención primeriza para detectar posibles afecciones y colaborar con los maestros - Archivo

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Durante los últimos días, la comunidad educativa de Menorca temía que se perdiera uno de los servicios que distinguen a la Isla como referente en la educación de niños de entre cero y tres años, los llamados Equipos de Atención Primeriza (EPA). Su temor estaba fundamentado, puesto que el pasado 13 de junio, un alto cargo del Govern balear anunció que este servicio se integraría dentro de otro mayor, los Equipos de Orientación Educativa y Psicopedagógica (EOEP) de los colegios de educación primaria. En la práctica, explican fuentes consultadas por este periódico, esta integración supondría la desaparición del servicio.

Desde ese día, la incertidumbre sobre la continuidad de estos equipos ha sido total. Nadie en el Govern confirmaba nada, ni aportaba más información. Nadie, hasta el viernes 22, cuando en Mallorca alguien aseguró que los equipos de atención primeriza se mantendrían. En Menorca, la primera noticia en este sentido llegó el pasado lunes, pero no fue hasta este viernes, mediante una reunión a través de videoconferencia, cuando se confirmó del todo: los equipos de atención primeriza continuarían trabajando en Menorca.

El Govern había considerado "la importante labor que realizamos y la necesidad de darle continuidad a pesar de las dificultades que atraviesa la administración", apunta uno de los responsables de los equipos en Menorca. Así, tras esta noticia, se confirma que "podremos seguir detectando y atendiendo a las 'escoletes', niños y familias que así lo necesiten", aseguran.

De este modo, 26 centros de Menorca podrán seguir contando con los servicios de unos equipos de atención primeriza que, eso sí, contarán con menos personal el próximo curso. Así, si en el presente 2011-12 el Govern aportaba 13 profesionales para este servicio, el próximo curso este número se reducirá hasta diez. Si se tiene en cuenta que el Consell y los ayuntamientos de la Isla aportan otros tres profesionales, se pasará de los 16 del curso pasado a los 13 que habrá este próximo curso.

Y si se echa la vista un curso más atrás, el 2010-11, cuando trabajaban 18 profesionales en los EPAs, el descenso habrá sido de cinco personas en tan solo dos años.
Estas personas son las encargadas de asistir a un total de 1.784 niños, de los cuales 1.409 tienen entre cero y tres años y por lo tanto son alumnos de alguna 'escoleta', ya sea pública o privada. El resto, 375 alumnos, ya cursan la educación infantil, y tienen entre tres y seis años.

INTELIGENCIA ECONÓMICA
La decisión de mantener los equipos de atención primeriza es valorada muy positivamente por sus responsables, quienes destacan además que tendrá consecuencias positivas en el plano económico. Así, aseguran que la detección precoz de posibles afecciones permite tratarlas de manera más temprana y así evitar tratamientos más largos que, al final, acaban siendo más costosos. Además, recuerdan que Menorca no dispone de organizaciones externas a los centros que se dediquen a estas labores, como sí pasa por ejemplo en Mallorca, al tener más población escolar.