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La práctica del botellón ha vuelto a popularizarse este verano en Es Pla de Sant Joan de Ciutadella. El reclamo de la zona de ocio nocturno de referencia en la Isla lleva a que grupos de personas aprovechen el anonimato de la noche para aparcar el coche y llevar bebidas en el maletero, que se consumen con las puertas del vehículo abiertas, incluso con música. La Policía Local de Ciutadella ha detectado esta práctica que vulnera la ordenanza municipal que prohíbe el consumo de bebidas alcohólicas en la vía pública.El inspector jefe de la Policía Local, Ignasi Camps, reconoce que en lo que llevamos de mes se han interpuesto siete denuncias por la práctica del botellón en la zona de Es Pla de Ciutadella. Señala que los agentes realizan controles periódicos en las noches de mayor afluencia de gente a la zona de ocio nocturno.

Los establecimientos de Es Pla de Sant Joan son los primeros en rechazar una práctica que les perjudica. Una situación que vienen denunciando cada verano debido a que la gente que consume alcohol en la vía pública no lo hace en los bares, ni en las condiciones de seguridad de los locales y sin la disponibilidad de servicios y aseos que tienen los establecimientos.La práctica del botellón deriva en problemas de incivismo y suciedad, tal como denuncia el autor de las fotografías que acompañan esta información.

Precisamente, los sábados y domingos, Es Pla amanece poblado de los restos del botellón tras las noches de marcha del fin de semana, cuando más gente se concentra en la zona de ocio nocturno. A la mañana siguiente, la zona aparece llena de botellas y vasos, tanto de vidrio como de plástico, y de bolsas de supermercado esparcidas. Según las quejas ciudadanas, no sólo se descubren los residuos que genera el botellón, sino también aparecen los malos olores de vómitos u orines.Las denuncias ciudadanas que han llegado a este diario inciden en la mala imagen que supone la práctica del botellón para Es Pla de Sant Joan y Ciutadella en general como atractivo turístico. Además se preguntan si el servicio de limpieza urbana dispone de un retén de refuerzo para dejar en condiciones la zona de Es Pla tras las noches en que se registra el botellón. Otra de las preocupaciones radica en que los contenedores que están instalados al final de Es Pla de Sant Joan permanecen gran parte del día repletos de basura, debido a que son el punto de recogida de gran parte de Baixamar. Existen voces ciudadanas que proponen una mayor presencia policial para erradicar la práctica del botellón como fenómeno causante de la mala imagen del final del puerto.