Mesa. María Auxiliadora Membrive junto a Cristina Rita, ayer en la sede del PSOE de Maó - Javier

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El Partido Socialista reabre el histórico debate sobre el traslado del CP Sa Graduada exigiendo la inmediata mudanza de los alumnos al nuevo colegio Maria Lluïsa Serra.

El desprendimiento de un ventanal por el deterioro de la infraestructura ha sido el detonante de esta nueva reivindicación por parte del PSOE que considera "grave" y "deplorable" que un edificio "no reúna las condiciones" y otro esté "desaprovechado". Es por ello que la diputada del PSOE, Cristina Rita, se apunta a aquello de que "más vale prevenir que curar" y considera imprescindible trasladar a los alumnos "antes de que debamos lamentar consecuencias más graves".

Rita presentará en el Parlament una proposición no de ley exigiendo el traslado inmediato al colegio público Maria Lluïsa Serra. Además, formulará preguntas sobre el mantenimiento actual del centro de Educación Infantil y Primaria de la avenida Josep Maria Quadrado respecto a las últimas obras que se han llevado a cabo y si han llegado informes sobre el estado de la escuela a la delegación de la Conselleria de Educación.

La diputada también detalló que según el Plan de Infraestructuras vigente, el CP Sa Graduada debería de haberse trasladado al nuevo centro. "No ha sido así por la presión de algunos padres y por el cambio de criterio del PP". En este sentido, Rita recordó que quien insistió para que no se produjera el traslado fue el conseller y concejal del PP Simón Gornés.

A diferencia, la diputada recordó que el PSOE impulsó la construcción de la nueva escuela para "ubicar a los alumnos del CP Sa Graduada en un centro con las condiciones de seguridad, espacios e instalaciones que se requieren y se arreglaba el problema de espacio de la Escuela de Adultos con una reforma del centro.

Es más, Rita calcula que las dos cuestiones estarían solucionadas con un coste aproximado a los 500.000 euros, cuando ahora, "el proyecto de adaptación de 'Sa Graduada' costará 1,9 millones y arreglar el Cuartel de Santiago, otros 3,5 millones".