Acto informativo. El equipo de gobierno convocó ayer un evento público para explicar el estado actual de las cuentas municipales - Cris

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El Ayuntamiento de Alaior ha reducido en un año y medio el total de su deuda con entidades financieras y proveedores en 3,8 millones de euros al pasar de los 16,8 millones contabilizados a mediados de 2011 a los 13 millones con los que cerrará el presente ejercicio.

Este dato, sin embargo, amaga una cifra envenenada. Y es que pese a la efectiva rebaja en el montante global, el Consistorio ha visto crecer su volumen de endeudamiento con los bancos en cinco millones de euros en este mismo periodo, como consecuencia de la concertación de tres préstamos dirigidos a pagar la práctica totalidad de las facturas pendientes de cobro por parte de empresas proveedoras.

De este modo ha pasado de los 7,4 millones con los que cerró el año 2011 a los 12,5 millones actuales, de los que se deriva una cuota de amortización más intereses de 1,4 millones de euros, siendo la del año pasado de 2,8 millones. A modo de resumen, tal y como queda recogido en el informe presentado ayer por la tarde a los vecinos en un acto público, desde mediados de 2011 el Ayuntamiento de Alaior ha dedicado 4,2 millones de euros a este capítulo.

A día de hoy, y según los datos facilitados por el equipo de gobierno municipal, Alaior sigue siendo el municipio más endeudado de Balears, soportando sus ciudadanos una carga de 974 euros por habitante cuando el promedio autonómico se sitúa en los 550 euros. Sorprende que la mayor parte de la deuda con proveedores, de acuerdo con el informe hecho público ayer, se contrajera en los últimos tres años, lo que a juicio de la regidora de Hacienda, Juana María Pons, denota "una falta total y absoluta de planificación a la hora de financiar grandes inversiones".

Pese a la dureza de los números, el gobierno que preside Misericordia Sugrañes está convencido de que es factible corregir la delicada situación económica que atraviesa el Ayuntamiento y, de hecho, asegura que a finales de año se llegará prácticamente al equilibrio presupuestario, esto es, a igualar las partidas de ingresos y de gastos. Para reforzar esta idea, la concejala responsable de las cuentas municipales ha remarcado que a finales del pasado mes de julio el gasto rondaba el 46 por ciento de lo presupuestado para todo el año, mientras que cuando llegaron en junio de 2011 había un déficit de caja de 989.000 euros.

"Nos propusimos no gastar más de lo que tenemos y lo estamos cumpliendo", puntualizó ayer la alcaldesa Sugrañes para acto seguido enumerar todas las medidas implementadas en este tiempo con el fin de racionalizar el gasto municipal. Entre ellas, a parte de la revisión de contratos, la reducción del gasto de personal con la supresión de 27 puestos de trabajo y la rebaja de los costes políticos (éstos últimos en un 50 por cien pasando de 155.003 a 78.429 euros), citó la subida del IBI.

"Somos conscientes de la injusticia de haber tenido que modificar este impuesto, pero si lo hemos hecho ha sido por culpa de la mala gestión del gobierno anterior". A este respecto, la edil de Hacienda matizó que, incluso habiendo subido el IBI de un tipo bajo a uno moderado, es decir, del 0,54 al 0,64, éste todavía queda por debajo de la media insular, situada en el 0,66.

Así las cosas, el equipo de gobierno tiene previsto ingresar por este concepto 955.000 euros que sumados al ahorro de 1.020.000 euros en gasto corriente da una cantidad de 2 millones con la que, en parte, pueden liquidar el gasto que se genera en el día a día. "Hemos conseguido pagar todo lo que estaba pendiente y lo que se genera. De hecho, ahora podemos decir que el Ayuntamiento de Alaior paga a 90 días".

Preguntada por el Presupuesto de 2013, Sugrañes no quiso avanzar cifras si bien comentó que serán unas cuentas en las que se mantendrá a rajatabla el equilibrio presupuestario. "Nos tenemos que ceñir al Plan de Ajuste ya que estamos muy controlados por el Ministerio de Hacienda". Al margen de ello, señaló que serán unas cuentas que permitirán hacer frente al gasto corriente, a la deuda financiera y "realizar alguna inversión".