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Los 21 concejales del Ayuntamiento de Ciutadella acordaron anoche disolver la servicio municipal de "Ciutadella Turisme", o CITUR, como también se conocía este departamento, que nació en junio de 2006 y que ha sido un foco de presunta corrupción y uno de los principales problemas con el que ha vivido la ciudadanía de Poniente los últimos tiempos.

La moción para liquidar este departamento la presentó, vía urgencia, el concejal popular Pedro Gener y obtuvo el apoyo total del arco municipal.

Pilar Carbonero, portavoz socialista dijo que "cuando se constituyó creímos en este servicio, per votaremos a favor de su disolución. Nació para que hubiera una acción conjunta en turismo entre el Ayuntamiento y empresas privadas, pero no ha sido así", manifestó. Por su parte, Joana Gomila, del PSM, indicó que "nunca vimos clara su función real y, como se ha demostrado, no ha servido para nada".

UPCM, mediante su portavoz Joan Triay, también manifestó su voto favorable a la moción popular y tras comentar que "no debía haber nacido", recordó a quién, "presuntamente", pudo haber favorecido. Sentenció que "era una cueva de Ali babà".

El hecho de eliminar CITUR se planteó por parte del equipo de Gobierno hace unos meses y en el pleno de ayer se ejecutó su idea, además con el voto de todos los representantes.

El pleno de ayer en Ciutadella arrancó con una cara nueva, la de Noemí Camps Villalonga, la joven socialista que ocupará el puesto de Ruth Moll en el grupo del PSOE.

Propuestas del Gobierno

La sesión plenaria aprobó la modificación de la ordenanza para de la Inspección Técnica de Edificios (ITE) para prolongar los plazos de ejecución. El PSOE presentó una enmienda para incluir ayudas para quien no pueda afrontar los gastos, cosa que el concejal Ramón Sampol indicó que se mirarían a través de Servicios Sociales.

Joan Triay propuso que se incluyera que técnicos municipales pudieran realizar esta inspección en el caso de gente con recursos insuficientes. Se aprobó con los votos de PP y UPCM y las abstenciones de PSOE y PSM.

Con los mismos votos de los partidos de derecha se acordó incrementar un 3,5 por ciento las tasas de los servicios del Hospital Municipal. Votó en contra el PSM y se abstuvo el PSOE. En cambio todos los grupos acordaron incrementar en un 3,5 por ciento las tasas de los servicio funerarios.

La ordenanza sobre horarios de la oferta turística (bares, restaurantes, y locales de ocio) fue aprobada con los votos del PP y UPCM, como ya habían consensuado ambos partidos, no sin que se generara un nuevo debate al respecto, que no varió, no obstante, la propuesta presentada y que ya se dio a conocer hace unos días a los medios.

Mociones

Fue desestimada una moción del PSOE sobre ahorro energético con los 10 votos contrarios del PP, los votos favorables de PSOE y UPCM, y la abstención del PSM.

En cambio otra moción socialista, la de solicitar al Govern balear que mantenga las partidas del Plan de Cooperación Local, obtuvo los votos favorables de todos, menos de UPCM que se abstuvo. Otra moción socialista tuvo el voto unánime, por lo que se pedirá al Govern que compense a Ciutadella por la reducción económica en el Plan de Prestaciones Básicas.

Otra petición del PSOE generó el debate entre Pilar Carbonero y Ramón Sampol. Se solicitó transparencia y hallar mejor colaboración entre la empresa de recaudación y el Área de Urbanismo. Carbonero alegó que podían ahorrarse 117.000 euros, ya que el contrato con la empresa permite la prestación de servicios de esta sin coste alguno, cosa que negó el titular de Urbanismo, Ramón Sampol, quien le dijo a la portavoz socialista que "usted no se entera de nada y cuando ustedes gobernaban Urbanismo fue un desastre".

Carbonero le recriminó las formas, aunque la moción prosperó con los votos de PSOE, PSM y UPCM. Se abstuvo el Partido Popular.

El Centro de Día se queda donde está

Una moción conjunta de todos los partidos de la oposición para pedir al pleno municipal que no se procediera al traslado del Centro de Día, prosperó, como era de esperar, al presentarla los tres grupos de la oposición y que son mayoría municipal. En cambio, el Partido Popular, quien había trabajado en el tema durante más de un mes para dicha operación se abstuvo.

Después de varias reuniones con el personal, familiares, las propuestas de la concejal de Servicios Sociales, Francisca Marqués, a los partidos de la oposición, informes, memorias y estudios económicos ante el Consell para avalar el cambio de ubicación, después de todo, el Centro de Día se quedará donde está, en la calle Degollador número 54.

PSOE, PSM y UPCM arremetieron con las formas utilizadas por el equipo de Gobierno en este asunto. Cabrisas, del PSOE, destacó que no procedía el traslado y optó por mantener el servicio como está ahora. Magí Muñoz del PSM recordó la prioridad en la atención a las personas mayores y atribuyó errores en los cálculos de ahorro realizados por el equipo de Gobierno. Además denunció las formas como se procedió con este tema.

También Joan Triay recriminó a Marqués la actitud "de hechos consumados" y dijo posicionarse con los argumentos que hicieron públicos los familiares para negarse al traslado". De ahí que no habrá cambio.