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El Club Marítimo de Mahón (CMM) ha considerado este viernes que la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de las Islas Baleares (TSJIB) que anula la adjudicación del concurso para la concesión de la antigua línea de atraque del Moll de Llevant del puerto de Maó a la empresa Trapsa Yates constituye una "gran oportunidad" para resolver el problema de falta de amarres que padece entidad náutica y que dificulta su labor de promoción deportiva.

La resolución judicial da la razón al Club Marítimo de Mahón y a la Asociación de Clubes Náuticos de Baleares (ACNB), y obliga a retrotraer el concurso público para la gestión de los amarres del Moll de Llevant al momento de la valoración de las propuestas de los licitadores, aduciendo que la comisión técnica no ha motivado suficientemente sus puntuaciones.

El TSJB confirma, de este modo, que la concesión de los antiguos amarres del club fue otorgada sin la debida justificación. "Se trata, sin duda, de un hecho grave, dado que el Club Marítimo de Mahón ha pasado por grandes dificultades para mantener su actividad desde que perdió los ingresos por la gestión de los atraques", han manifestado fuentes de la entidad.

En esta línea, la Junta Directiva del Club Marítimo de Mahón entiende que es momento "de mirar hacia delante" y de buscar "soluciones constructivas" a la situación actual, sin necesidad de perjudicar a terceros.

En este sentido, han recalcado su intención de mantener un diálogo fluido con la Autoridad Portuaria de Baleares para acceder de la manera legal más adecuada a la gestión de amarres que permita dar servicio a sus asociados y obtener los ingresos necesarios para sufragar las actividades deportivas.

Del mismo modo, han destacado que, a pesar de la precariedad derivada del procedimiento administrativo revocado por la máxima instancia judicial de Balears, el Club Marítimo de Mahón ha seguido llevando a cabo una intensa actividad deportiva, como son la organización de la Copa del Rey de Barcos de Época, la Regata Menorca Sant Joan, Campeonatos de España y de Baleares de vela ligera y la Escuela de Vela y Piragüismo.

"La sentencia del Tribunal Superior de Justicia de las Islas Baleares da argumentos al Club Marítimo de Mahón para reclamar con más fuerza, si cabe, su demanda de amarres, pero en ningún caso debe llevar a la confrontación con la Autoridad Portuaria de Baleares ni con el vigente concesionario del Muelle de Levante", han señalado antes de indicar que la decisión de la Justicia "debería contribuir al definitivo acercamiento que propicie una solución satisfactoria para todas las partes".