Acreditación. Soledad Seisdedos entregó el certificado de AENOR al presidente de ASHOME, Joan Melis - I.P.D.R.

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En Menorca hay 26 establecimientos de alojamiento turístico que cuentan con la certificación ISO 14.001:2004 sobre sistemas de gestión ambiental, una cifra a tener en cuenta pero que ASHOME y AENOR pretenden incrementar, con el objetivo de mejorar la Isla como destino turístico. Y es que de cada vez más, los clientes de los mercados emisores tienen en cuenta el respeto al medio ambiente a la hora de elegir su lugar de vacaciones.

La Asociación Hotelera de Menorca renovó ayer su certificado ISO 14.001 sobre sistemas de gestión ambiental, una calificación que obtuvo en 2007. Por ese motivo estuvo ayer en Menorca la directora de la delegación en Balears de AENOR (Asociación Española de Normalización y Certificación), Soledad Seisdedos, quien entregó la acreditación al presidente de ASHOME, Joan Melis.

Seisdedos señaló que ASHOME fue una de las primeras asociaciones españolas y la primera de Balears en obtener esta certificación, y destacó la importancia de ello ya que, al agrupar a los establecimientos hoteleros de la Isla, es el canal idóneo a la hora de transmitir la necesidad de apostar por la dinamización turística y concienciar sobre lo positivo que es llevar a cabo una gestión con criterios medioambientales.

Joan Melis indicó que la coincidencia con el vigésimo aniversario de la declaración de Menorca como Reserva de la Biosfera hace más necesario que nunca reiterar el compromiso de los menorquines con esta denominación, mientras que Seisdedos apuntó que "los touroperadores exigen cada vez más esta cultura medioambiental", especialmente los mercados nórdicos. De ahí que haya esa "necesidad de que todos vayan con la filosofía de la Reserva de la Biosfera".

Beneficios

ASHOME es consciente de que cambiar los procedimientos y el funcionamiento de los establecimientos no es sencillo y, además, puede comportar algunos gastos, pues hay que realizar diferentes mejoras. Sin embargo, todos estos cambios acaban repercutiendo en una disminución de costes, gracias a la optimización de recursos, ya sea en electricidad, consumo de agua, o generación de residuos, entre otros.

"A la larga beneficia a la comunidad y al destino". Y es que, señala Melis, "hay más demanda por los destinos verdes, y eso obliga a más cosas", señaló.

Playas

AENOR también destaca lo positivo que es que los ayuntamientos también apuesten por esta concienciación medioambiental. Así, Soledad Seisdedos recuerda que Menorca es la Isla con más certificaciones en sus playas urbanas. Hay seis en Ciutadella, una en Ferreries y dos en Alaior. Mientras, Es Mercadal no ha mantenido las que tenía, y Maó, Sant Lluís y Es Castell nunca han tenido aún ninguna distinción respondiendo a estos criterios medioambientales.