Nueva generación. Martí, Laura y Sara Guasteví interpretaron juntos una pieza en el concierto en recuerdo de su padre, Lluís Guasteví. Herederos de su pasión por la música, todos ellos continúan con la tradición familiar y tocan distintos instrumentos. - Gemma Andreu

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El teatro del Orfeón Mahonés acogió el pasado viernes un homenaje póstumo al músico mahonés Lluís Guasteví Ginard (Maó 1950-2012), con un concierto de la Orquestra del Grup Filharmònic de l'Ateneu de Maó que logró reunir en la sala a cerca de doscientas personas.

Entre los músicos, los hijos de Guasteví, Laura (fagot solista) y Martí (clarinete solista) y Sara (viola), ofrecieron sin duda uno de los momentos de más emotividad de la noche, cuando tocaron juntos sobre el escenario en recuerdo de su padre, quien les transmitió su vocación por la música.

El público pudo escuchar obras de Vivaldi (Concierto en Mi m RV 484 para fagot y orquesta de cuerda), Elgar (Serenata para cuerdas op.20) y Mozart (Concierto en La M KV 622 para clarinete y orquesta) ejecutadas por los miembros del grupo bajo la dirección y batuta de Lola Mir.

Treinta músicos que pusieron toda su profesionalidad en el reconocimiento a la figura de Guasteví y su familia, entre ellos sus hijos y compañeros.

Luis Guasteví dio sus primeros pasos musicales de la mano de su abuelo, Diego Guasteví, músico mahonés y habitual del Teatre Principal. Como instrumentista se inició con el violín y el saxofón, que estudió en el Conservatorio Profesional de Música de Menorca, pero fue con la percusión, en la que fue autodidacta, con la que materializó su sentido musical participando en diferentes orquestas y bandas.

Hasta el año de su fallecimiento, 2012, tocó con la formación The Four Collected. Su pasión por la música se ha transmitido ya a la quinta generación.