Consistorios. Solo cinco municipios, entre ellos los dos menorquines, entregaron sus cuentas en plazo - Archivo

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La Sindicatura de Comptes advierte del incumplimiento del objetivo de estabilidad presupuestaria ya en 2010 por parte del Ayuntamiento de Ciutadella, que tardó otros dos años en aprobar el plan de saneamiento económico que le ha permitido ahora, en 2013, pagar las facturas a proveedores en un plazo de entre 30 y 40 días. Así, según el último informe emitido por este órgano de fiscalización de las cuentas públicas, tres municipios de los doce analizados -los que a 31 de diciembre de 2010 tenían una población superior a los 20.000 habitantes-, incumplían dicho objetivo de estabilidad presupuestaria, Ciutadella, Llucmajor (Mallorca) y Sant Josep de sa Talaia (Eivissa), aunque solo los dos primeros estaban obligados a aprobar un plan económico y financiero de reequilibrio.

El motivo es que dichos consistorios presentaban un déficit en el saldo no financiero superior al límite del 5,5 por ciento fijado para 2010.

Por otro lado, en relación a la liquidación presupuestaria y el remanente de tesorería, la media del índice de sostenibilidad presupuestaria de los ayuntamientos estudiados es del 6,8 por ciento. Los ayuntamientos de Ciutadella y Palma fueron los únicos que presentaron un resultado negativo de dicho indicador, como consecuencia del déficit generado durante el ejercicio 2010.

Ahorro
La media del ahorro neto de los ayuntamientos analizados es del 6,2 por ciento y el de Palma es el único que en 2010 no presentó esa cifra en positivo, lo que demuestra la incapacidad de la entidad para hacer frente a las obligaciones financieras con los ingresos corrientes. Esto supone el incumplimiento de uno de los requisitos que establece el Texto Refundido de la Ley Reguladora de las Haciendas Locales para incrementar el endeudamiento, además de la necesidad de aprobar un plan de saneamiento.

La Sindicatura señala que la mayoría de corporaciones locales incumplen los plazos que fijan la Ley de Haciendas Locales y el propio órgano fiscalizador para las diferentes fases del ciclo presupuestario y de la rendición de la cuenta general del ejercicio 2010.

Endeudamiento
De acuerdo con la capacidad de ahorro que muestra la liquidación del Presupuesto de 2010, el Ayuntamiento de Palma necesitaría un plazo mínimo de 43 años para amortizar su deuda, mientras que el de Llucmajor requeriría 23,4 años.

Estos dos ayuntamientos son los únicos entre los analizados que superan los 10 años de plazo máximo para poder amortizar su deuda; entre los que menos tiempo necesitarían se encuentran Calvià y Marratxí, ambos también en Mallorca, que según los indicadores estudiados tendrían capacidad para amortizar su deuda financiera en menos de dos años.

En dicho cálculo la Sindicatura no menciona ninguno de los consistorios menorquines.
La media del endeudamiento sobre los ingresos corrientes de los doce municipios más poblados de Balears es del 72,3 por ciento, una media que se halla 52,5 puntos porcentuales por debajo del límite fijado en el Texto Refundido de la Ley de Haciendas Locales. Según el informe de 2010, el Ayuntamiento mallorquín de Llucmajor es el que presenta el indicador de endeudamiento sobre los ingresos corrientes más alto (116,7 por ciento).

La Sindicatura destaca asimismo que el margen estructural -indicador de sostenibilidad economicofinanciera-, empeora en todos los ayuntamientos del estudio salvo en los de Maó y Calvià, que presentan márgenes estructurales superiores al 20 por ciento.