Fachada. El antiguo matadero está en la Costa de Llimpa, en las inmediaciones de Sa Bassa de Sant Pere - Gemma Andreu

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El Ayuntamiento de Alaior gestiona un proyecto para sacar de las ruinas el antiguo matadero municipal ubicado en la Costa de Llimpa, cerca de Sa Bassa de Sant Pere. El edificio, que fue utilizado como desolladero desde finales de los años 50 y que lleva cerrado y en desuso una treintena de años, se encuentra en muy mal estado y en peligro de derrumbe, fruto del abandono.

Así, el Consistorio ha iniciado los trámites para consolidar la estructura del edificio y reformarlo para su conversión en una zona de actividades lúdicas para los vecinos de Alaior, además de dedicar una parte de la infraestructura para su uso como almacén de la brigada municipal.
Además de resucitar de entre las ruinas a un edificio que se encuentra en muy mal estado, la iniciativa del Ayuntamiento pasa por recuperar una antigua tradición.

Y es que esta zona siempre ha estado muy vinculada a aquella actividad rutinaria de ir a merendar a Sa Bassa de Sant Pere con familiares o amigos.

La alcaldesa, Misericordia Sugrañes, señala que "queremos recuperar esta antigua tradición que tanto caracteriza a los alaiorenses con la puesta a disposición de un espacio donde los vecinos puedan reunirse para celebrar cualquier evento. Y añade que "pretendemos que sea como un club social donde todos los vecinos del pueblo van a ser socios". Además, el Ayuntamiento requiere del alquiler de naves para almacenar material municipal. Con la actuación, el Consistorio podrá utilizar esta nave para acumular enseres.

La zona cuenta con varias edificaciones. La principal, que es la que se destinaba antiguamente a matadero, cuenta con una superficie de 317 metros cuadros. Dispone de un cuerpo a la izquierda en la fachada principal que será demolido por su deterioro además de invadir prácticamente la calzada de la Costa de Llimpa. La actuación que propone el Ayuntamiento en este edificio principal pasa por rehabilitar estructuralmente los forjados de todo el edificio. Se ampliará una zona para dedicarla a aseos. Así, la nave contará con una habitación de 63 metros cuadrados como sala polivalente y una cocina de otros 32 metros. Estos habitáculos dispondrán de una puerta que unirá la sala polivalente con la zona de pinar. Asimismo, el resto de la parcela, de 176 metros cuadrados, servirá para el almacenaje de material municipal.

Existen otros dos edificios en la parte trasera del matadero, uno de ellos de 117 metros cuadrados y otro de 45 metros que antiguamente se utilizaba como establos. La propuesta inicial es su derribo por el deterioro que padecen además de que su tipología constructiva impide cualquier otro uso.

Cabe señalar que esta organización de espacios podría variar. Y es que se trata del anteproyecto que el Ayuntamiento plantea para la redacción definitiva de la redacción del proyecto de obras y de actividades así como la dirección de obras para la consolidación estructural del edificio.

El presupuesto máximo que fija el Ayuntamiento para esta redacción del proyecto de obras y dirección facultativa de las mismas es de 12.402 euros (más IVA) y el presupuesto de ejecución de las obras asciende a 155.035 euros.

Sugrañes señala que el próximo día 6 e septiembre acaba el plazo para la presentación de ofertas. El Ayuntamiento prevé ejecutar el proyecto en tres fases. El primero es la habilitación de la zona de cocina, sala de uso recreativo-social y los aseos. Una segunda será la rehabilitación estructural del resto del edificio y la demolición del cuerpo adosado al edificio principal y por último, la demolición del resto de cubículos y adecentamiento de la parcela.

La alcaldesa asegura que la primera fase se ejecutará de inmediato tras haber cumplido los plazos establecidos para ello. Las dos fases siguientes se abordarán según disponibilidad presupuestaria.